CINE / CASTING
El primer contacto con la cámara
El equipo de casting de la película ‘El maestro que prometió el mar’ realiza estos días en Burgos una primera selección de niñas y niños que intepretarán a los alumnos de Antoni Benaiges en el filme
Nadie diría que desde el pasado jueves se está realizado un casting de actores en el Centro de Creación Escénica «La Parrala». En este caso, de pequeños actores que interpretarán a los alumnos del docente catalán Antoni Benaiges en el filme El maestro que prometió el mar. No hay tumultos ni gentío agolpado a las puertas del lugar como se pudiera presumir ante el gran éxito de la convocatoria. La razón de esta relativa calma la encontramos en esa valla que debemos saltar a diario varias veces para seguir con nuestra vida sin dar demasiados trompicones: la pandemia.
«El covid ha hecho desaparecer esas grandes colas y esas esperas que al final eran contraproducentes para los aspirantes. Ahora se hace una primera selección a través de internet y se convoca a los niños elegidos en un día y a una hora para hacer las pruebas presenciales. Pero también seguimos haciendo pruebas a través de vídeos. En total, estamos viendo a cerca de mil candidatos. Estamos alucinadas con la respuesta», explica Karmen López Franco, una de las ayudantes de Irene Roqué, la directora del casting del filme. Y es así. Apenas media docena de niños junto a algunos padres o familiares esperan su turno en gran sala de ensayo de La Parrala.
«Como los niños no son actores, son ‘actores naturales’ como se llaman ahora, tienes que encontrar a esos niños y niñas que estén cerca de lo que está escrito en el guion. Son procesos más largos que con adultos, que son actores profesionales que conocen las herramientas de la interpretación».
Si la ilusión por vivir una experiencia como esta se refleja en la cara de los pequeños, qué decir de lo que sienten los padres y familiares de las criaturas. Son conscientes de que la probabilidad de que elijan a su hija o hijo para el reparto de la película es muy pequeña, pero sólo por conocer cómo es un casting y acercarse a un proyecto de cine, algo un tanto exótico por estos lares, ya merece la pena. «A los padres se les nota esas ganas de que sus hijos vivan esta experiencia», indica López Franco. «También hemos visto a lo largo de los años un cambio en la disposición de los niños hacia estos procesos de selección. Lo audiovisual es algo muy cotidiano en su vida y no se asustan al ver una cámara como podía ocurrir con generaciones anteriores Y, aunque no lo creamos, son conscientes a tan poca edad de lo que supone ser actor o actriz. Ven muchas series y películas e identifican a algunos intérpretes que salen en diferentes trabajos con toda normalidad. ¡Son muy listos y están muy espabilados los niños de ahora!», señala la responsable del casting con simpatía.
Carrusel de candidatos
Acompañamos a Karmen López Franco en una de las pruebas que realizó en la mañana de ayer sábado. Entramos en una pequeña estancia de La Parrala junto a dos niñas que fueron seleccionadas tras enviar sus datos y fotografías a un correo electrónico que facilitaron las productoras del largometraje. Elsa tiene 11 años y reside en Miranda de Ebro. Celia tiene 10 y viene desde Araúzo de Miel. Sentadas con una tela negra a sus espaldas miran al frente, Karmen y su pequeña cámara de vídeo las observan atentamente. El ambiente es relajado. Tras las mascarillas de las dos aspirantes se nota cierto nerviosismo mezclado con un punto de timidez. Quizá sea Tomás Alonso mientras hace unas fotografías quien imponga cierto respeto... Pero ambas tienen un brillo en los ojos que promete alegría y vivacidad.
Celia (izquierda) y Elsa son dos de los cientos de candidatos que participan en el casting. TOMÁS ALONSO
Karmen comienza a dirigirse a ellas como quien charla con sus amigas en un banco a la sombra un día cualquiera de verano. Elsa primero y Celia después le confiesan sus aficiones, la relación con sus amigos, la vida en familia... Cuando habla cada una de las niñas, se retiran la mascarilla para que la videocámara grabe sus rostros al natural y Karmen vea el gesto y la sonrisa de ambas. Luego, hacen una prueba de interpretación que los autores de esta información no presenciaron por respeto a las candidatas, no quisimos ser su ajeno principio de incertidumbre.
Muchos se preguntarán: ¿Y cómo es la vida de un niño en un rodaje de cine? López Franco nos lo explica. «Se tiene en cuenta que no son profesionales y se les apoya con un ‘coach’ de interpretación. Y siempre hay una figura familiar para que los niños estén tranquilos. Además, en los proyectos con niños, entre ellos acaban haciendo un grupo muy fuerte de amistad que les hace más fácil el día a día de la grabación».
Una enorme cantidad de candidatos entre niñas y niños de 8 a 11 años pasarán este largo fin de semana por La Parrala en esta primera fase de selección de los pequeños actores. Más tarde, se irán realizando más pruebas en las que se incorporarán la directora de casting, Irene Roqué, y la directora de la película, Patricia Font, para llegar a una prueba final donde los niños y niñas elegidos ensayarán con el actor que interpretará a Benaiges, que todavía no se ha anunciado pero que según López Franco es «un actor conocido y va a gustar mucho».
Proyecto en marcha
El largometraje El maestro que prometió el mar está basado en la historia real del docente tarraconense Antoni Benaiges, que llegó en 1934 a la escuela del pueblo burgalés de Bañuelos de Bureba con un novedoso método pedagógico bajo el brazo, la técnica Freinet. La fascinación que produjo su figura como maestro y su implicación política con las ‘izquierdas’ en la cercana Briviesca dejaron una huella inolvidable en los vecinos de la comarca. Aunque estos recuerdos quedaron enterrados tras su detención y asesinato en los albores de la Guerra Civil. Ha sido desde hace poco más de una década cuando su historia y su legado ha empezado a ser reconocido.
El filme, que dirige Patricia Font, se comenzará a rodar probablemente a finales del mes de agosto. Minoría Absoluta, Lastor Media y Filmax son las productoras de la película que cuenta con la participación de TVE, TV3, el ICAA y el ICEC -el Institut Català de les Empreses Culturals-.