Burgos, «capital del jazz en Castilla y León»

Algo tiene el jazz. De mágico, evocador y, sobre todo, transversal. Pocos géneros son capaces de «aunar en un mismo escenario a los más diferentes tipos de músicos». Las barreras culturales y generacionales desaparecen. La «pasión» emerge y el público contempla embelesado el recital, donde la improvisación fluye como Pedro por su casa. Bajo esa premisa surgió el Festival Internacional de Jazz Sesión B, cuya tercera edición conlleva un salto cualitativo y cuantitativo con artistas de «talla internacional» como Sarah McCoy, Steffen Morrison o Yolanda Brown. Promovido por la Fundación Caja de Burgos, la cita tendrá lugar desde el 12 de febrero hasta mediados de mayo en la capital burgalesa y en Aranda de Duero. «El jazz no es solo música. Es una forma de vida, una forma de ser, una forma de pensar». Parafraseando a la inigualable Nina Simone, la responsable de Cultura e Innovación Educativa de la Fundación, Beatriz Rodríguez, ha destacado la apuesta -ya ganada- del Sesión B por convertirse en «referente nacional». Gracias, en gran medida, a su integración en la plataforma Jazz España, cuyo principal objetivo es consolidar una «red activa» más allá de la organización de conciertos. Teniendo en cuenta además que el Sesión B es el «más grande» a nivel regional dentro de su ámbito, lo que se busca es convertir a Burgos en «capital del jazz en Castilla y León». A este respecto, el director de programación cultural de la Fundación, Rafael Peña, ha subrayado la necesidad de «abrir la puerta» a otras instituciones para lograrlo. Talento localPara abrir el festival, Caja de Burgos aboga por lo «simbólico». Es decir, con gente de la casa. De Castilla y León para ser más exactos. Para ello, nada mejor que El Alquimista Loco, formación impulsada por Carlos Soto y Alberto García (Celtas Cortos) en compañía de Adal Pumabarín, César Díez y Jesús Bravo. El gran aliciente, según apuntaba Peña, es que la banda 'hermana' del mítico grupo vallisoletano llega con ganas. Y lo demostrará en el Cultural Cordón el 12 de marzo cuando presente en «primicia» su último trabajo, El aire del globo. También en clave nacional, aunque actualmente resida en Nueva York, la saxofonista y compositora madrileña Berta Moreno aterrizará el 22 de abril en el Cultural Cordón con su ecléctica propuesta. Nos encontramos, en palabras de Peña, ante una «rara avis en el mundo del jazz». Para bien, pues no todo el mundo es capaz de «fusionar músicas diversas, (...) difíciles de mezclar» con tanta «sensibilidad». Por si fuera poco, Moreno asistirá ese mismo día al Foro Solidario para relatar su experiencia como voluntaria en Kenia, tanto en lo humano como en lo musical. Sin salir del país, Colina, Miralta y Sambeat (CMS) celebrarán de nuevo su XV aniversario, pospuesto por el dichoso Covid, el 8 de abril en el Cultural Cordón. Sin lugar a dudas, según ha remarcado Peña, este trío puede presumir de haber «representado a España en numerosas ocasiones» con solvencia. Grandes artistas internacionalesLa pandemia frustró la presencia de algunos artistas internacionales en anteriores ocasiones. Pero ha llegado el momento, y además están «deseando conocer Burgos». Es el caso de Yolanda Brown, que «por fin» se dejará ver por estos lares el 7 de mayo. Ganadora de dos premios MOBO y presentadora en «programas de máxima audiencia» en Reino Unido, ofrecerá uno de los «conciertos más esperados» en el Cultural Cordón. Otra de las grandes actuaciones del Sesión B será la de Sara McCoy, en el mismo enclave, el 4 de marzo. Tal y como ha señalado Peña, el público tendrá la ocasión de conocer cara a cara a «una gran promesa del jazz en América» que destaca por su «personalidad y carácter muy teatral». En definitiva, «un monstruo en el escenario» y con nuevo disco bajo el brazo. Tampoco desmerece en el cartel la inclusión de Steffen Morrison. Oriundo de Surinam y residente en Ámsterdam, se mueve con soltura entre el funk y el soul sin ocultar sus influencias, que van desde los Rolling Stones hasta James Brown. El show, en este caso, se desarrollará en el auditorio de la avenida Cantabria el 19 de marzo.Para rematar la programación de conciertos, el festival apuesta por Noa Lur y su Swing for  Kids. Aunque el nombre del show ya lo dice todo, se trata de una propuesta familiar que plantea adaptaciones sonoras de películas sobradamente conocidas por los más pequeños de la casa. Así pues, el Cultural Cordón se dejará envolver por las melodías de Disney y Pixar el 22 de mayo junto a piezas clásicas de la historia del swing. Aranda también suenaDesde la capital hasta la Ribera del Duero, el Sesión B reserva dos 'pesos pesados' para Aranda. El primero, confirmado para el 13 de mayo, The Tibbs. Presentes en la primera edición del festival, era de justicia contar una vez más con el «mayor exponente del funk y del soul en Europa». Su carisma, según Peña, emana sobremanera de Elsa Bekman, un «animal escénico» que alcanza sin rubor la «potencia de Janis Jopplin».Recuperado el aliento, el pianista turco Gökhan Sürer (en formato Quintet) viajará por medio mundo junto a sus compañeros de inquieta aventura musical. Asentado en Barcelona desde hace casi una década, fusiona jazz con aires mediterráneos y «evocaciones» a Oriente mientras coquetea con el funk o el rock con total naturalidad. Más allá del escenarioAparte de los conciertos, el Sesión B sigue impulsando actividades complementarias. En el apartado formativo, los burgaleses Mario Calzada y Pablo Treceño impartirán un taller de ritmo y percusión en el Cultural Cordón el 19 de marzo. Y cruzando el charco desde Boston para compartir sus conocimientos el día 30, TJ Jazz pisará el mismo espacio para ofrecer una clase magistral de tap dance (claqué, para que nos entendamos). Entre medias, la Asociación de Músicos de Jazz y Músicas Creativas de Castilla y León (Amjazzcyl) congregará el 24 de marzo en el Cultural Cordón a músicos, productores y un sinfín de profesionales de los festivales de la Comunidad para analizar los retos y oportunidades que hay por delante. Ya en mayo, concretamente los tres primeros martes del mes, el Cultural Cordón acogerá un ciclo de cine cuyo leitmotiv es «jazz y superación». Partiendo de esta base, se proyectarán Born to be blue (Robert Budreau, 2015), Green book (Peter Farrelly, 2018) y Whiplash (Damiel Chazelle, 2014). Artistas pendientes de traerPor ahora no ha sido posible, pero tiempo al tiempo. Los organizadores del Sesión B tienen dos espinitas clavadas, pero sanarán las heridas «en futuras ediciones». Según ha confesado Peña, los artistas que se pueden dar ya por confirmados -sea cuando sea- son los británicos Ala.ni y Speedometer, que ya tuvo que aplazar su actuación en Burgos el año pasado por cuestiones de movilidad sanitaria. «Les traeremos», ha insistido el director de programación cultural de la Fundación convencido de que el público siempre responde a ambos reclamos porque «no se van a pasar de moda».