La Institución Fernán González y la Fundación Círculo retoman su colaboración

Se respiraba ambiente de alegría este viernes en la sala de prensa de plaza de España de la Fundación Círculo. Tras unos últimos tiempos académicos muy fructíferos, con una gran cantidad de estudios publicados y actos llevados a cabo, la actividad organizativa y logística de la Institución Fernán González se ha visto un tanto aturdida por un asunto capital: el cambio de sede. Tras muchos vaivenes y lugares barajados, por fin la Real Academia Burgense de Historia y Bellas Artes se trasladará en las próximas semanas a la antigua biblioteca de Cajacírculo, sita en la primera planta del edificio de plaza de España. Un gran espacio, propiedad de Ibercaja, de unos 400 m2 que duplica con creces el actual emplazamiento en la segunda planta del Consulado del Mar. De esta forma, se ha conseguido ese lugar «digno» que la institución reclamaba desde hace meses a sus patrones, la Diputación. El anuncio ha coincidido con otra cuestión no menor: la firma del convenio de colaboración de la institución burgalesa con la Fundación Círculo, que reemprende el compromiso que antaño tenía la Fernán González con la antigua caja de ahorros.

El presidente de la Fundación Círculo, Emilio de Domingo, se mostraba «muy satisfecho por retomar un antiguo convenio que siempre tuvo Cajacírculo con la Institución Fernán González y que, tras unos años en el dique seco, por fin se ha reanudado», señaló. «El convenio supone una aportación económica de 8.000 euros y la cesión de mobiliario para su nueva ubicación y una selección de unos 1.500 libros pertenecientes a la antigua biblioteca de la caja de materias variadas».

En esta nueva colaboración también se incluye el uso de las instalaciones de la Fundación Círculo por parte de la Institución Fernán González «para todo tipo de actividades que vayan programando» más la realización de publicaciones conjuntas. «Estamos muy satisfechos de ayudar y colaborar con esta institución tan señera en la ciudad y la provincia de Burgos», subrayó Emilio de Domingo.

El mismo mensaje compartió el director de la Real Academia Burgense, René Jesús Payo. «Es una enorme satisfacción presentar este convenio que tiene una vocación de colaboración», apuntó desgranando la contribución de la caja en otra época, resaltando cuando apoyó la publicación del Boletín de la institución o la digitalización del «grueso del fondo de los Machado que todo el mundo puede consultar en la red». Payo recalcó que este apoyo «va más allá de lo económico, que es importante».

Fondo Zugazaga

El presidente de la fundación hizo hincapié en el Fondo Zugazaga, que reúne una gran cantidad de libros, fotografías y otros materiales del que fuera secretario personal de Manuel Machado, José María Zugazaga. Este fondo fue confiado por su propietario en su momento a la pretérita Caja del Círculo y esta lo puso en manos de la Fernán González para que lo catalogara y estudiara debidamente. «Me consta que se ha hecho un primer análisis y están saliendo cosas bastante interesantes», señaló De Domingo. «Las catas que hemos hecho han dado algunos resultados sumamente esperanzadores para ahondar en un mayor conocimiento de los hermanos Machado», añadió René Jesús Payo. «Se está haciendo una investigación que verá la luz, en una publicación conjunta entre la Real Academia y la Fundación Círculo, posiblemente a finales de 2023».

Otro gran proyecto conjunto que están preparando para el año que viene es una exposición sobre la imagen de Burgos desde el siglo XVI hasta el XX a través de las piezas de «un gran coleccionista, Carmelo Martín, burgalés residente en Bilbao» que posee una extraordinaria compilación de grabados de la ciudad. «Espero que la firma de este convenio sea el inicio de un largo camino de actividades conjuntas que serán, al fin y al cabo, en pro y en bien de la cultura, la historia y el arte de Burgos», concluyó el director de la Fernán González.