CINE / 'RODANDO BURGOS'
El volantazo que puede cambiar tu vida
El pasado fin de semana se rodó en la capital burgalesa ‘De paso’, el cuarto y último cortometraje del proyecto ‘Rodando Burgos’ que dirige David Pérez Sañudo / Sus protagonistas son los actores Gustavo Salmerón y Álvaro Cervantes
Tras la grabación en anteriores semanas de Artesanía, Agrio y Rey de la semana, Burgos recibió de nuevo al equipo de David Pérez Sañudo para rodar De paso, una historia sobre el reencuentro de dos hermanos que protagonizan Gustavo Salmerón (Todo es mentira, Mensaka) y Álvaro Cervantes (El árbol de la sangre, 42 segundos) que, además de intervenir también en la pieza Rey de la semana, es uno de los productores de los cortometrajes.
El campus del Hospital del Rey de la Universidad de Burgos ha sido la localización central de esta cuarta pieza de ficción. Un aula de la Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales recibió el pasado viernes a un profesor nuevo, Manu, personaje que interpreta Álvaro Cervantes. El alumnado, en esta ocasión, dejó de tomar apuntes para fijar toda su atención en el proceso de grabación del filme: colocación de luces, posiciones de cámara, toma de sonido, instrucciones entre miembros del equipo... todo preparado para grabar los planos que correspondían en esa jornada. La siguiente, el sábado, tuvo como lugares de grabación la cafetería de la Facultad de Derecho y la zona en torno al ‘Tablero’, donde suena mucha y buena música en directo todos los meses de julio. Ya el domingo, fueron varias zonas de la ciudad donde se tomaron planos de Fernán -personaje que interpreta Salmerón- conduciendo su camión y descargando su mercancía en las instalaciones de Arcecarne en el polígono de Villalonquéjar.
Este cortometraje, escrito por David Pérez Sañudo sobre una idea original de Belén Sánchez- Arévalo, cuenta la historia de dos hermanos que llevan muchos años sin verse. Fernán es transportista y viaja con su camión por toda la geografía española. Un día que pasa por Burgos decide buscar a su hermano Manu. Lo hallará en la universidad, donde es profesor, y el acercamiento no será nada afectuoso. ¿Habrá un golpe de volante que solucione su relación? «Es una de esas situaciones de la vida que, quizás por malas decisiones, te separas de un ser querido y tienes la sensación de que cuanto más pasa el tiempo más difícil será el reencuentro. Algo se queda enquistado y se crea un vacío a veces insalvable», explicó Gustavo Salmerón en una pausa del rodaje.
El actor madrileño, que debutó en el cine de la mano de Julio Medem en La ardilla roja, ha protagonizado varios cortometrajes a lo largo de su carrera. Pero también se colocó detrás de la cámara en una ocasión. Fue en 2002 con Desaliñada, protagonizado por Candela Peña, Ernesto Alterio y Guillermo Toledo y que obtuvo el Goya al mejor cortometraje de ficción. Años después, y también como director, obtuvo el Goya al mejor largometraje documental -entre otros muchos premios- por Muchos hijos, un mono y un castillo (2017). «Un corto es como un cuento y hay que tener cierta maestría para condensar una historia en pocos minutos. El largometraje, el documental y corto son formatos diferentes y cada uno tiene sus leyes y normas. Las del corto, por ser una película de menos duración, no son más sencillas ni mucho menos... ¡Es todo un arte!», señaló con simpatía. «El corto nunca ha tenido el prestigio que merece. Y hay verdaderas piezas maestras en ese formato y se siguen rodando grandes historias en diez, quince, veinte minutos».
Salmerón se considera «un actor obediente, pero me gusta aportar y remar a favor de la historia que el director quiere contar. Y en este aspecto David es alguien muy receptivo». Sea como fuere, el protagonista de Asfalto o Fotos disfruta de las dos facetas. «En ambas situaciones de rodaje, es muy placentero mandar y que te manden», ríe.
4 cortos, 4 historias
«El ritmo de grabación ha sido intenso, pero hemos cumplido perfectamente el plan de rodaje de todos los cortos», indica Elena Maeso, directora de producción de las piezas de Rodando Burgos.
Desde octubre el equipo de Amania Films fue cerrando los guiones, explorando el elenco, cerrando fechas, buscando los espacios de rodaje... «Trabajamos muy bien con Silvia Arribas de la Burgos Film Commission. Les pasamos un desglose de todas las localizaciones de los cortos y fuimos buscando los mejores lugares para rodar», apunta Maeso. Alo largo de las últimas semanas de 2022 se acercaron a la capital burgalesa los jefes de equipo para ir conociendo ‘in situ’ los diversos emplazamientos seleccionados. Parte del equipo de producción acompañó a David Pérez Sañudo junto a la directora de arte, Itziar Álvarez, y el director de fotografía, Kenneth Oribe, para ver distintas opciones de bares, fábricas, pisos, calles, comercios...
Elena Maeso destaca que grabar en un ciudad poco acostumbrada a la presencia de rodajes conlleva situaciones más sencillas y otras que no lo son tanto. «Hay cosas que son mucho más ágiles por la comodidad que da una ciudad de las dimensiones de Burgos. Con la Policía Local hemos tenido una relación muy estrecha y cercana. Algo que en Madrid, por ejemplo, no es así. Por otro lado, un domingo de rodaje nos costó encontrar un lugar que pudiera dar de comer a todo el equipo a un precio razonable... Pero en conjunto ha sido una maravilla. Sin contar el tiempo que ha hecho, claro», añade entre risas.
Y es que la meteorología no ha acompañado al rodaje de estas cuatro historias. El clásico fresco burgalés se vistió de un frío polar que todavía no nos ha abandonado. «¡Es que comenzamos el rodaje nevando! Afortunadamente, los guiones ya estaban pensados para que el tiempo no fuera un problema en este sentido... Parece magia, pero el tiempo ha definido casi los cortos: Artesanía es lluvia, Agrio es nieve, Rey de la semana es frío loquísimo y De paso es un sol de asustarse», ríe y recuerda que Pérez Sañudo quedó encantado con los planos de nieve que rodaron para Agrio, el corto protagonizado por Patricia López Arnaiz e Itziar Ituño.
Cultura
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ALBERTO MARROQUÍN
Elena Maeso, que ha trabajado en varios proyectos de David Pérez Sañudo -entre ellos, el largometraje Ane, ganador de tres premios Goya- y series de televisión como Vergüenza o El Ministerio del Tiempo, destaca el buen recibimiento que ha tenido la capital castellana hacia el proyecto y con el equipo. «En general, la ciudad de Burgos ha respondido de manera increíble. Nos vimos desbordados de ‘e-mails’ para colaborar con nosotros, la figuración... Yquiero destacar la labor de los profesores y alumnos del instituto Diego Marín Aguilera, donde además rodamos parte de Rey de la semana. Muchos de los alumnos estuvieron algunos días de meritorios y como figurantes, pero también algunos se acercaron los días que no les tocaba para vernos trabajar y les noté muy emocionados», concluye Elena Maeso, que junto a Agustín Delgado y Almudena López, ha capitaneado el equipo de producción de los cuatro cortometrajes de la iniciativa Rodando Burgos.