Todo sobre Óscar Esquivias

Esquivias y Pérez Barredo se conocen desde hace muchísimos años. Además de ratos privados, han compartido multitud de presentaciones, entrevistas y otros actos públicos. Este miércoles, escritor y periodista se encontrarán sobre el escenario del salón de actos de la Fundación Círculo de plaza de España a partir de las 8 de la tarde para charlar sobre el vicio de los libros, el rito de la escritura o la liturgia de la vida. El acto, que forma parte de la programación de Círculo Creativo, cuenta con entrada libre hasta completar el aforo.

Óscar Esquivias Galerón nació en Burgos en 1972. Creció en un barrio en plena metamorfosis, que cada día olía más a humo de fábricas que a vientos de cereal. Aquel Gamonal de los 70 estaba celebrando la expansión del Polo de Promoción Industrial, con nuevas empresas que se instalaban casi a diario y que necesitaban mucha mano de obra, esa que multiplicó la población del barrio por varios números en apenas una década y convirtieron a esta zona del este de la capital burgalesa en la zona más populosa de su larga geografía desplegada lo largo del Arlanzón.

Esquivias ha relatado en diversas ocasiones que su pasión por la lectura comenzó entre los estrechos pasillos de anaqueles de la biblioteca pública de su barrio. Por las manos del pequeño Óscar pasaron desde los álbumes de las locas andanzas de Astérix y Obélix contra los romanos hasta las complicadas y excitantes tribulaciones de Tintín, su perro Milú y el capitán Haddock. De la fascinación por las viñetas, saltó a las páginas de las novelas de aventuras de Julio Verne y Emilio Salgari, entre otros. Un título que siempre ha señalado como la obra que le marcó en su infancia fue 'El libro de la selva' de Rudyard Kipling. Años después, durante la adolescencia, otro clásico removió las tripas del futuro Premio Castilla y León de las Letras, concedido en 2016: 'Crimen y castigo', de Fiódor Dostoievski, novela que tomó en préstamo de la biblioteca del instituto Félix Rodríguez de la Fuente donde cursó BUP y COU.

Durante su etapa universitaria -se licenció en Filosofía y Letras en la Universidad de Burgos- comenzó a jugar con la literatura y otras de sus grandes pasiones: las revistas. Codirigió El Mono de la Tinta (1994 y 1998) y fundó y dirigió Calamar (1999 a 2002). Hace un año regresó a sus labores de editor con la revista Mirlo, publicación que codirige con el fotógrafo, diseñador y cómplice en otras aventuras Asís G. Ayerbe. También colabora con otras publicaciones, entre las que destaca Archiletras, que dirige el periodista burgalés Arsenio Escolar.

La carrera literaria de Óscar Esquivias es frondosa, elegante y muy atractiva. Su prosa, aparentemente sencilla, sin duda deslumbrante. Tras ser galardonado en tres ocasiones con el Premio Letras Jóvenes de Castilla y León en los años 90, su primera publicación llegó en el año 2000 con 'Jerjes conquista el mar', novela con la que obtuvo el Premio Arte Joven de la Comunidad de Madrid. En ese mismo año, bisagra del siglo XX y XXI, fue galardonado con el Premio Ateneo Joven de Sevilla por 'El suelo bendito'. Tras estas dos novelas, se embarcó en el proyecto literario más ambicioso que ha afrontado hasta hoy: la llamada ‘trilogía dantesca’, compuesta por 'Inquietud en el paraíso' (Premio de la Crítica de Castilla y León 2006 y un auténtico ‘long-seller’ en las librerías burgalesas), 'La ciudad del Gran Rey' y 'Viene la noche', todos publicados por Ediciones del Viento, sello que acoge gran parte de su obra.

Tras esta trilogía, Esquivias publicó varios libros de cuentos como 'La marca de Creta' (Premio Setenil 2008) o 'Pampanitos verdes'. También destacan en su corpus literario algunas obras juveniles como 'Huye de mí, rubio' y las dos novelas de Étienne. Además, ha publicado muchos artículos en prensa y prólogos en libros de todo tipo. Sin olvidarnos de libros muy curiosos como 'Secretos xxs' o 'Calle Vitoria', un artefacto de papel de más de ocho metros de largo sobre la kilométrica rúa burgalesa realizado junto a Asís G. Ayerbe, o 'Alguien se despierta a medianoche', una joya bibliográfica publicada por Reino de Cordelia con textos del escritor burgalés e ilustraciones de Miguel Navia.

Óscar Esquivias vive desde principios del siglo XXI en Madrid, aunque su alma viajera le tiene en ruta constantemente y sus visitas a Burgos son periódicas. En estas dos ciudades, el escritor invierte y desgasta la mayoría de días del año en su labranza literaria. Pero, seguramente, su lugar en el mundo es Villandiego. Aunque su agenda laboral siempre está rebosante de citas y proyectos, Esquivias siempre encuentra algunos días durante el verano para guarecerse en su pueblo del ruido vital que le rodea el resto de la temporada. Allí ha comenzado o acabado algunos de sus libros, como si de un sortilegio poético se tratara, mirando por la ventana de su habitación hacia los campos de cereal recién cosechado o paseando ratos sin reloj por caminos de concentración hacia Olmillos de Sasamón o Yudego, hermosas localidades cercanas a Villandiego.

Un escritor curioso y juguetón

Pérez Barredo reflexiona sobre la obra y la figura del autor de 'Andarás perdido por el mundo'. «No descubro nada diciendo que Óscar es el mejor escritor burgalés de su generación, y puede que de varias generaciones. Es puro talento. Vive su condición de escritor con naturalidad porque para él la literatura no es un asunto trascendente, excepcional o extraordinario. Juega y se divierte escribiendo (y leyendo, porque ha sido, y es, un lector voraz; y no se puede comprender al Esquivias escritor sin el Esquivias lector)», indica. «En la aparente sencillez de su escritura -salvo en obras que exigían otros registros- radica, a mi entender, una de sus virtudes: nada hay más difícil que escribir con sencillez, claridad, exactitud. Es un autor curioso, juguetón, bienhumorado, que entiende la literatura como un instrumento que enriquece la realidad. Y un virtuoso narrando lo cotidiano y radiografiando el alma humana, esos paisajes interiores con sus mundos de ideas y sentimientos», asevera el periodista de Diario de Burgos.

Este miércoles, sin aparente guion, Esquivias y Pérez Barredo mantendrán «una charla de amigos, pero con público», señala el escritor con simpatía. Celebrar la amistad y la literatura siempre es una buena razón para encontrarse, bien sea en el rincón de un bar, en un banco del paseo del Espolón o en el salón de actos de la Fundación Círculo. Parafraseando al clásico de Mankiewicz y con cualquier tema musical de Hector Berlioz de fondo, conoceremos de la mano de su protagonista y de Rodrigo Pérez Barredo «All about Óscar». Sea.