Novela 'Secretos al alba'
¿Por qué una escritora argentina ambienta su novela en Burgos y Covarrubias sin conocerlos?
Gabriela Exilart, novelista argentina de éxito, tira de referencias históricas, literarias y Google Maps para ambientar la historia de María de la Paz sin conocer la ciudad
Como María de la Paz Noriega, protagonista de la novela 'Secretos al alba' , Grabiela Exilart ha recorrido los rincones de Covarrubias, ha paseado por el Espolón y visto las agujas de la Catedral desde el Mirador del Castillo. La escritora argentina ambienta en Burgos capital y en localidades rurales como Covarrubias su novela 'Los secretos al Alba'. «No conozco Burgos más que por la investigación y fotos, aunque a través de María de la Paz pude viajar con la imaginación, y pese a no haber estado, la pude ver con sus ojos», explica.
Expresaba su deseo de, en el viaje de promoción a España, poder visitar Burgos. Algo de lo que ha dado cuenta en sus redes sociales, emocionada por pisar aquellos lugares en los que transcurre la historia de María de la Paz Noriega y Antón Navarro, un periodista radiofónico que vende de los micrófonos de la radio instalada en los bajos del Teatro. . . . Principal para expiar con golpes un pasado que duele. El mismo que persigue a la protagonista que busca el origen de su padre. Abandonado en un convento de la provincia burgalesa.
‘Secretos al Alba’ es la secuela de ‘En la arena de Gijón’. La segunda transcurre en Asturias, en plena Guerra Civil. El foco de la resistencia. La primera une en un largo viaje de tren a la protagonista asturiana de nacimiento con Castilla, con Burgos, en los años 50. Pleno franquismo en la capital del Bando Nacional. «Cuando escribí ‘En la arena de Gijón’ la ambienté en Asturias como homenaje a mi abuelo, que era asturiano, y además porque fue uno de los sitios que más resistió. La segunda novela, ‘Secretos al alba’, elegí ambientarla en Burgos porque allí se asentó el franquismo, entonces me parecía un buen contraste de historias», señala la escritora argentina.
Burgos aportaba así «ese contraste histórico con la Asturias republicana». Reconoce que, hasta esta visita no conocía Burgos. La búsqueda de documentación e información le permitió recrear algunos de esos lugares. «Me documenté principalmente con libros sobre la guerra civil, algún que otro cancionero, documentales, entrevistas… También libros de ficción ambientados en la época de la guerra. Y la maravilla de internet que con Google Maps y demás aplicaciones uno puede ver ciertos lugares sin haber estado allí», señala.
La villa rachela son los orígenes de María de la Paz Noriega. Los de Gabriela Exilart tienen algo que ver con España. Es nieta de españoles emigrados a Mar de Plata. «Mi mamá es española, mis abuelos también. Ellos vivieron la guerra, mi abuela era franquista, mi abuelo republicano y tenía que comprender ese matrimonio», relata. Así que las historias de la Guerra Civil española no le eran extrañas. «Mi infancia estuvo llena de historias y canciones españolas cantadas por mi abuela, a mi abuelo no llegué a conocerlo». Y como la protagonista de su novela, empezó a indagar en esa historia que, también, era suya. «Empecé a investigar y cada vez me fui metiendo más y más en la historia así que no podía quedarme solamente con la guerra, quería retratar también el después».
Cultura
«Juana de Castilla es una de las mujeres más maltratadas de la historia y por la historia»
Alberto Marroquín
Sus historias, es una prolífica escritora que va a novela por año, tienen un nexo común: la mujer y la historia. Son relatos de mujeres fuertes que, como la protagonista de 'Los secretos al Alba', se revelan ante la invisibilidad que imponía un tiempo contado por hombres. «Muchas mujeres participaron de forma activa en la guerra, en el frente de batalla, conduciendo vehículos como corresponsales, incluso una argentina, Mika, Feldma de Etchebehere, llegó a capitanear una milicia». Añade.
En cuanto a su ritmo endiablado de novelar historias, cuenta que el secreto es hacer las cosas con pasión. «Para mí escribir es eso, una pasión, un recreo, es vivir otras vidas todos los días y creer que cuando se quiere, se puede». Respecto a las dudas que en muchos despierta las novelas románticas, que copan la cartelera de las plataformas audiovisuales, considera que antes de opinar se deberían dejar a un lado el prejuicio y leer. «Si se animaran descubrirían que hay mucho más detrás de una historia de amor y cambiarían de opinión», asegura esta escritora con un importante ritmo de ventas en Argentina que ya cuenta con dos picas en forma de novela plantadas en España.