XXV Escena Abierta
«El Escena Abierta nunca ha estado en peligro, es un proyecto de ciudad»
La crisis redujo su presupuesto a la mitad pero «decidimos seguir, es una ventana necesaria para la escena contemporánea»
El trabajo para la 26 edición del Escena Abierta empieza mañana lunes. El festival es un fijo en el calendario de programación de las tres instituciones implicadas: Ayuntamiento de Burgos, Fundación Caja Burgos y Universidad de Burgos. Un proyecto asentado en sus programaciones. Ni cuando algunas propuestas históricas cayeron el año pasado, se contempló el cierre del Escena Abierta. «El festival nunca ha estado en riesgo, al menos que nosotros sepamos, de hecho en la Universidad es al revés preguntan por lo que estamos trabajando», explica el codirector del Escena Abierta, Carlos Lozano
El festival arranco con Luis Marcos como concejal de Cultura en la legislatura de Ángel Olivares (PSOE y Tierra Comunera). Continuó con Juan Carlos Aparicio y Javier Lacalle. Siguió con el gobierno de Daniel de la Rosa y el apoyo de Ciudadanos y suma su edición 25 con el bipartito PP y Vox que lidera Cristina Ayala aunque la cartera cultural depende de Vox con Marta Alegría al frente.
«Tenemos una estructura bien cimentada en tres pilares, entes diferentes entes que convierten al Escena Abierta en un proyecto de ciudad, no en un proyecto de carácter político y eso no se ha roto», explica Lozano. Asegura que «forma parte de la programación anual de las tres instituciones y es que no tenemos reuniones con los concejales desde hace no se, 16 años».
«Es una marca de ciudad, aunque lo que sí nos afectó, como a todas las instituciones, fueron los recortes derivados de la crisis económica, supuso una reducción del 50% del presupuesto y se decidió seguir adelante, con un festival más modesto, porque consideramos que era una responsabilidad seguir adelante y mantenerlo», añade el técnico del área de Cultura y codirector del festival, Ignacio de Miguel.
«Nunca ha estado sobre la mesa que lo que estábamos haciendo no era relevante, no tenia vigencia, no era necesario ... Teníamos que continuar», señala Beatriz Rodríguez, responsable del área de Cultura y educación de Fundación Caja de Burgos. «Cerrar hubiera supuesto también el cierre de un espacio en el que los creadores de la escena contemporánea pudieran mostrar su trabajo al público, y no podíamos renunciar porque siguen sin entrar en el circuito habitual de teatro», concluyen
Lo que más ha cambiado en estos 25 años son las referencias de posibles grupos que entren en la programación. Muchos ya envían el dossier, la información o un vídeo. Antes era más complicado. «Antes teníamos que ir a las ferias, había festivales, verlo en directo, pedir un video... Ahora es mucho mas fácil», reconoce Lozano. Para el Escena Abierta 2025 empezarán ya a revisar las entre 130 y 150 propuestas que pueden llegar.
«Ahí hacemos una criba de unas 40 y elegimos cuatro, que forman la estructura del festival, y empezamos pero de los otros 40 no nos olvidamos, les hacemos seguimiento», explica Lozano. Se eligen por temática, por lenguaje, que haya un «abanico de propuestas diferentes». El trabajo es constante «es una rueda que no para, las compañía estrenan continuamente y aunque nos llegan los vídeos, la percepción que te deja el público eso, lo tienes que ver», explica Rodríguez.
Los hay de primera línea que quieren volver pero «se nos escapan del presupuesto o no tienen fechas». Y se busca, también, la equidad. «No puedes pagar a uno 1.000 euros y a otro 30.000 buscamos un equilibrio», señalan. También se ofrecen propuestas durante las exhibiciones o se ve a programadores que apuntan la cita del Escena Abierta de Burgos en el calendario. Y en esta dinámica continuarán para seguir siendo esa ventana abierta a la creación escénica contemporánea desde una pequeña ciudad de provincias.