El Correo de Burgos

FÚTBOL / Segunda División B. Grupo I

El Mirandés no levanta cabeza

Los de Bañuelos ofrecen una gran imagen en Pamplona, pero no encuentran el camino del gol. Siguen sin conocer la victoria en 2010

Burgos

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Osasuna B: Zabal, Bari, Richi, Ekhi, Palacios, Gascón, Alex Fernández, Gabilondo, Torres (Líbano m.46), Annunciata (Antxón m.66) y Óscar Vega.

CD Mirandés: Iván Gómez, Garmendia, Raúl Lozano, Raúl García, De la Plata, Gámiz, Tártara, Tato (Iribas m.84), Royo (Morgado m.79), Candelas (Rodellar m.63) y Haritz.

Árbitros: De Burgos (colegio vasco). Amonestó a los locales Gabilondo y Alex Fernández; y a los visitantes Gámiz y Candelas

Goles: No hubo.

DIEGO SAN MARTIN / Pamplona

El Mirandés tampoco pudo estrenar su contador de triunfos en el nuevo año en su visita a Tajonar. Al equipo burgalés le faltó el calor del gol para rubricar su mayor dominio en muchas fases de un partido presidido por el intenso frío.

Los de Bañuelos contaron con más ocasiones que su rival, pero la falta de puntería y la seguridad de Zabal evitaron que el Mirandés noquease a Osasuna en un duelo en el que mereció ganar a los puntos.

El cuadro rojillo supo contener a Osasuna Promesas en unos minutos iniciales en los que Gámiz y Tártara, ayer destacados, gobernaron en la medular. La zaga burgalesa adelantó metros y, si bien el Mirandés no encerró a los navarros, sí comprometió al equipo de Merino con balones en la frontal del área. La primera ocasión destacable del partido la protagonizó De la Plata, pero su centro al punto de penalti solo pudo peinarlo Haritz. El aviso del Mirandés funcionó de despertador de los rojillos, que pasado el primer cuarto de hora subieron la línea de presión y nivelaron el partido en el centro del campo.

Aunque de manera muy intermitente, entraron en acción los creativos medioscentros de Osasuna y la primera aproximación rojilla tuvo lugar en el minuto 18 en un buen centro de Alex Fernández desde el vértice del área que Annunciata cabeceó forzado arriba.

Los de Bañuelos pusieron fin a su tregua con dos disparos desde la frontal a cargo de Royo, que chutó alto, y de Candelas, que tres minutos después probó a Zabal con un intento frustrado. El equipo burgalés, más dominador, supo cerrar así sus ataques y no conceder contragolpes, aunque a su juego le faltó amplitud.

Sin embargo el Mirandés encontró una rendija en la zaga navarra en una rápida combinación que trajo consigo la mejor opción de toda la primera parte. Haritz se plantó ante Zabal y el rechace del guardameta, que salió bien a cerrar, lo despejó como pudo Bari. El punto final de la jugada lo puso Candelas, cuya volea desde la frontal se fue alta. El Mirandés, cómodamente instalado en terreno rojillo, cerró los primeros 45 minutos con otro disparo de Tato que exigió la estirada de Zabal.

Pese a contarOsasuna con tres medios creativos en la medular apenas había tráfico en el eje de creación  rojillo por lo que Merino optó por prescindir de un desaparecido Roberto Torres  y dar entrada a Líbano, un punta para jugar más directo pero poco se notó el cambió puesto que fue el Mirandés el que siguió sumando las ocasiones. En una de ellas, tras un córner, Garmendia disparó desde la frontal y tras tocar en un defensa probó la habilidad de un Zabal providencial. Fue un arranque prometedor de la segunda mitad en la que sin embargo el fútbol se congeló durante muchos minutos.

El tramo final resultó un poco más abierto pero ambos equipos se mostraron sin demasiadas ideas. A once minutos del final los locales tuvieron la mejor oportunidad en un pase de Antxón, que controló bien Vega, pero en el que el delantero local disparó alto en buena posición.  El equipo burgalés sumó así un punto, un pasito importante aunque sigue sin encontrarse con la victoria en este 2010.

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