El año que Autocid nunca olvidará

DIEGO ALMENDRES / Burgos

No puede negar Autocid Ford que 2010 fue un año especial. Quién sabe si crucial para el futuro del baloncesto de elite en Burgos. Celebra el club burgalés los éxitos cosechados y asume la reponsabilidad de dar la continuidad necesaria al proyecto para que 2011 sea igual de positivo tanto desde el punto de vista deportivo como institucional.

De momento, ya nadie podrá arrebatar la gloria vivida a la entidad azulona. Porque a lo largo de los últimos 12 meses, las noticias positivas se han acumulado para disfrute de un equipo que ha sabido sortear los pocos momentos malos que ha encontrado en el camino. Un total de 32 victorias en 47 partidos (24 en 34 choques de Liga Regular) disputados son 32 motivos para sonreír.

Disputar la final por el ascenso a ACB, forzar el quinto partido ante el potente Menorca y conseguir que toda una ciudad respire baloncesto se presenta como el espaldarazo definitivo para un club que hace mucho tiempo que va en serio en el mundo del deporte. «Trabajamos por Burgos y para los burgaleses y paseamos con orgullo su nombre», destaca el presidente, Miguel Ángel Benavente.

Son innumerables las imágenes, los momentos, las fechas  y los nombres propios que quedarán para siempre en el recuerdo de aquellos que tienen sangre azul en las venas. Tras un irregular sprint final de 2009, la victoria que ponía el punto y final al pasado año fue, casualmente, el inicio de algo maravilloso para la entidad. Las 10 victorias acumuladas sin fallo en el arranque de 2010 cimentaron las bases de unos meses mágicos para Autocid.

El 30 de abril dio comienzo las semanas más bellas que se recuerdan en el baloncesto local, un tiempo en el que Burgos terminó por conectar con un equipo que se plantó en la final tras dejar en la cuneta al Cáceres y a Melilla por sendos 3-1.

Sólo Menorca y la lesión de Chris Hernández frenaron en seco a un Autocid fortalecido de la experiencia. El nuevo proyecto mantiene intactas las expectativas y, superados todos los contratiempos, el remozado plantel cierra el año con un balance de 11 victorias y 5 derrotas, a la espera de que 2011 traiga buenas noticias...ANDREU CASADEVALL: «Hicimos que la ciudad se vistiera de azul»

Llegó en 2007 con la misión de salvar al Autocid del descenso y más de 120 partidos después como entrenador del conjunto azulón se ha convertido en artífice de la época dorada del club en la LEB Oro. Andreu Casadevall cierra con satisfacción un 2010 «muy positivo», al que sólo le faltó «la guinda». «Jugamos el quinto partido de una final por el ascenso y, a pesar de las lesiones, estuvimos ahí», valora el preparador, sin olvidar que aquel Autocid ofreció «un buen espectáculo» e hizo «que la ciudad se vistiera de azul».

El técnico sabe que el impulso dado por ese proyecto es clave para el futuro del baloncesto burgalés. «Dimos un paso adelante y es importante que Burgos se identifique con el equipo», explica, antes de centrarse en una nueva misión tan ilusionante como la completada el pasado curso. «Estamos recomponiendo el equipo después de las salidas y lesiones sufridas. Desde que estamos todos juntos jugamos mejor, pero yo me quedo con el trabajo colectivo», indica.

Y es que a pesar de los contratiempos, Autocid cierra su mejor año con un margen de maniobra que hace difícil predecir su límite. «Se hablaba de que habíamos perdido la columna vertebral, pero el equipo de esta temporada crecerá. Acabar con 11 victorias es positivo y ver El Plantío como si fuera el play off es signo de que Burgos quiere repetir lo vivido», señala. Un objetivo «difícil» para un 2011 que se afrontará con la «humildad», la «seriedad» y el «trabajo» protagonizado en 2010.MIGUEL ÁNGEL BENAVENTE: «Esta página ya forma parte de la historia»

Un protagonista que guardará con cariño cada recuerdo de este 2010 es Miguel Ángel Benavente, presidente de un Autocid que da por buenas todas las experiencias vividas. «Nos quedamos a un pasito del ascenso y ahora estamos en tercera posición. Es para estar orgullosos», destaca. «Si habláramos de vinos, diríamos que la de 2010 fue una cosecha excelente», apunta el dirigente. Al echar la vista atrás, Benavente sabe que el club estuvo muy cerca de meterse en un lío maravilloso como era jugar en ACB, aunque la directiva nunca sintió vértigo. «Ya dijimos que no renunciaríamos a aquello que se ganara en la cancha. Sin embargo, todo lo ocurrido en aquella final, sobre todo lo que rodeó a la lesión de Chris Hernández y sus consecuencias, quedará para la leyenda», señala.

Hila fino Benavente en su exposición. «Esta página ya está escrita en la Historia y como participantes de este capítulo nos sentimos contentos y orgullosos. Dentro de unos años los aficionados diremos aquello de 'yo viví aquella temporada'», subraya.

Ahora, se trata de mirar al frente y pensar en nuevas metas. «Estamos en un momento histórico y si Burgos quiere que haya deporte de masas debe dar un paso adelante. Y cuando hablo de Burgos me refiero a sus máximos representantes, porque la afición, a la que deseo un feliz año nuevo, ha estado sobresaliente», asevera. Mientras, en la cancha el equipo suma y sigue. «Para 2011 tenemos que ser optimistas y exigentes. Queremos estar en el play off, sin descartar nada», explica.