Las complicadas cuentas de la Arandina

R. MENA / Burgos

El futuro de la Arandina en la Segunda B pende de un hilo. Las matemáticas aún le dan opciones de continuar un año más en la categoría, aunque su situación es harto complicada. Tiene un pie en la Tercera División después de perder en Salamanca el pasado domingo y ahora está obligado a vencer dos los partidos que le restan, Ponferradina y Mirandés, y esperar que sus rivales directos no ganen, ya que en el caso de que sumen tres puntos serían inalcanzables. La reacción en el tramo final de la Liga de Palencia y Real Sociedad B ha supuesto una losa para los arandinos, que han seguido haciendo sus deberes, pero ha sido insuficiente para continuar a la estela de dos equipos que en las últimas jornadas tienen números de play off. En el lío también se ha metido el Real Unión, otro de los equipos a los que la Arandina podría dar caza.

Lo peor de todo es que los blanquiazules no dependen de sí mismos. Mantienen la fe y jamás tirarán la toalla, aunque en el vestuario también son conscientes de que  las posibilidades con las que cuentan son pocas.

Álex, el capitán de la escuadra burgalesa y toda una institución en el club ribereño,  tiene muy claro que el vestuario luchará «hasta el final». «Sabemos que las opciones son pocas, pero las vamos a agotar. Lo único que podemos hacer es ganar los dos partidos y esperar a ver lo que pasa en los otros encuentros», explica.-sigue en la edición escrita-