Y al noveno día se reivindicó

Moisés Dueñas regresó al profesionalismo con ganas de demostrar que tenía un hueco en la elite, que las personas se merecen una segunda oportunidad después de equivocarse. Por otro lado, quería devolver cuanto antes la confianza que había depositado en él tanto Julio Andrés Izquierdo como el Burgos BH.Dicho y hecho. Le han bastado 9 días de competición en el conjunto burgalés para conseguir un triunfo que además sirve para inaugurar el palmarés de la escuadra castellana en esta temporada. Es una victoria tiene mucho de reivindicación, pero también de agradecimiento. Además supondrá una enorme inyección de moral para un colectivo que ha trabajado duro durante toda la campaña, pero que no acababa de recoger los frutos.

Fueron muchas las sensaciones que experimentó Dueñas cuando cruzó la línea de meta de Villamanín. La define como «una victoria emotiva» y habla de sentimientos tanto personales como colectivos. «Fue especial para todos. En este deporte es muy difícil ganar y lo pude hacer. Además pude devolver parte de la confianza que han depositado en mí. Llegó en la etapa reina, con puertos propios de una Vuelta a España.El marco fue también especial. El equipo venía trabajando muy duro y también hizo un esfuerzo para que yo estuviera en este final de campaña y todo esto ayuda», comenta el salmantino.

Reconoce que en los últimos 200 metros, cuando sabía que la victoria la tenía en el bolsillo, fueron muchas cosas las que le pasaron por la cabeza. Vuelve a hablar de emoción y no sólo se refiere a lo personal, sino también a lo colectivo, ya que entiende que haberlo logrado con el Burgos BH también fue «especial».-SIGUE EN LA EDICIÓN IMPRESA-