BALONCESTO / Adecco LEB Oro
El fondo de armario salva al Autocid
Incómodo de principio a fin, la aportación de cada pieza resultó clave en un partido difícil / Huesca llevó la iniciativa durante 28 minutos / Alberto Miguel puso El Plantío en pie con una noche para el recuerdo desde el triple. El cántabro clava 6/6 desde el perímetro / Marcus (9/10 en tiros libres), Sikma y Jeff Xavier sostuvieron a los locales hasta el tercer cuarto
AUTOCID FORD 93
LOBE HUESCA 82
Autocid Ford: Dani López (6), Alberto Miguel (21), Marcus Vinicius (15), Pep Ortega (9), Luke Sikma (13) –quinteto inicial- Juan Aguilar (3), Isaac López (4), Jeff Xavier (13), Sergio Olmos (4), Jorge García (5), José Manuel Bartolomé (-), Rubén Duarte (-).
Lobe Huesca: Abouo (7), Samuels (22), Costa (12), Krusic (1), Cebular (20) –quinteto inicial- Lafuente (2), Nasarre (7), Orfila (7), Pukis (4).
Árbitros: Uruñuela y Aliaga.
Eliminados: Cebular (min. 36), Lafuente (min. 37).
Parciales: 19-14, 40-41 (descanso); 65-59 y 93-82 (final).
DIEGO ALMENDRES / Burgos
Autocid es un bloque fiel a su estilo, por convicción y por necesidad. Debe seguir el guión a rajatabla para encarrilar los partidos y todo parte desde la defensa. Si es capaz de imponer sus condiciones, todo va como la seda. Ayer, sin embargo, le tocó sufrir durante 28 minutos para encarrillar el incómodo partido que le planteó Huesca. Se agarró el cuadro de Casadevall al parquet en los peores momentos e hizo gala de inagotable rotación hasta acabar con la resistencia verde, aunque el protagonismo fue para Alberto Miguel.Tardó el equipo burgalés en encontrar la continuidad en su esfuerzo en retaguardia y Huesca no tardó en refugiarse en el desorden para incomodar a los de casa. Para eso, nada mejor que posesiones cortas rematadas por un arma letal como Cebular. Hizo daño el exterior visitante y, tras un inicio entonado de los de Casadevall (8-5), pronto los oscenses se hicieron con el mando del marcador y del ritmo de juego.Sólo Marcus Vinicius mostró el nivel de intensidad, eficacia y acierto que requería la situación. Al principio, el brasileño buscó superioridad en el poste bajo sobre Abou, después se multiplicó en defensa y apareció en ataque para, con 7 puntos, sacar al Autocid del bache. El 12-16 fue el primer toque de atención, aunque el único momento de lucidez del arranque no fue suficiente. Y éste coincidió cuando conectó con su juego interior.El 17-16 del final del cuarto inicial tampoco impulsó a los castellanos. Los vicios se agudizaron y el nefasto arbitraje de Aliaga, consentido por Uruñuela, sólo contribuyó a reafirmar el planteamiento visitante. Autocid perdió el norte y necesitaba un punto de inflexión de inmediato. A 6:09 para el descanso, Olmos cometió su segunda falta y el electrónico reflejaba un inquietante 19-28. Problema muy serio que, de un plumazo, encontró la solución.Sikma, vital, protegió a Olmos de las faltas y su entrada fue un soplo de aire fresco. El americano apretó el acelerador y Jeff Xavier destapó su mejor versión anotadora para castigar el aro verdiblanco. Entre los dos guisaron un parcial de 14-4 para completar la remontada en un visto y no visto (33-32). Cerradas las fuentes de alimentación del rival, Autocid pudo correr y sacar provecho de los lanzamientos abiertos.Otra vez, el bloque burgalés había salvado una situación comprometida y, por eso, dio por bueno alcanzar el intermedio con una mínima desventaja (40-41). Apenas cinco minutos necesitó Jeff Xavier para demostrar su importancia en el engranaje una vez se encuentre al mejor nivel físico.Autocid estaba avisado para la segunda parte. Por eso, intentó de inicio mantener las buenas costumbres con el triángulo Sikma-Jeff-Marcus como apoyo fundamental. Poco le duró el planteamiento porque la tercera del caboverdiano partió los planes de un Autocid que veía cómo su esfuerzo no tenía la recompensa que buscaba. Siempre en la nuca de su rival, pero sufriendo cada acción. Así, hasta que Alberto Miguel y Pep Ortega pusieron de nuevo a los locales por delante con el 58-54 a tres minutos para el final del cuarto, todo un alivio después del difícil camino recorrido. Ellos se bastaron para en el último arreón llevar a los de El Plantío a un máximo tope de siete puntos (65-58), oro puro en una noche tan incómoda. Sigue en edición impresa