Autocid busca un golpe de efecto en Andorra

Autocid quiere volver a sonreír y una victoria ante Andorra tendría un efecto analgésico que aliviaría alguno de los males del conjunto azulón. Los problemas se han multiplicado en el equipo burgalés en esta campaña. Las lesiones se han convertido en su talón de Aquiles, a lo que hay que añadir el caso Milosevic, consecuencia de la sentencia Gloger. El equipo no ha tenido una semana completa de tranquilidad y esta tarde (17,00 horas) en el Poliesportiu d’Andorra tiene la oportunidad de quitarse lastre, sobre todo en el apartado anímico.

La derrota ante el Leyma Coruña ha hecho daño en el vestuario burgalés y un triunfo ante Andorra supondría una importante inyección de moral para la escuadra que dirige Andreu Casadevall. «Vamos a Andorra con la ilusión de obtener la victoria, de demostrar que somos un equipo potente y que podemos hacer cualquier cosa. No va a ser fácil, sin duda», expone el técnico.

La empresa es complicada y es que el conjunto azulón tendrá enfrente al que para muchos es el equipo más fuerte de la Adecco LEB Oro. Es una formación creada para conseguir el ascenso directo y en estos comentos comanda la clasificación, aunque hay tres equipos (Breogán, Palencia y Leyma Coruña) con el mismo bagaje.

La pasada campaña ambos conjuntos dominaron el panorama nacional y se jugaron tanto la final de Copa como el primer puesto.En ambas batallas salió victorioso Autocid, por lo que enAndorra le tienen ganas al equipo de Burgos. Lo caprichoso del calendario ha provocado que ambos rivales se vuelvan a enfrentar en la última jornada de la primera vuelta y que, por consiguiente, este duelo cierre también la competición liguera. Andorra tiene la posibilidad de asegurarse la Copa Príncipe en calidad de local y todo pasa por vencer a Autocid.

Si por algo destaca el conjunto del Principado es por su poder ofensivo.Es el equipo que más puntos hace y Marc Blanch y Jordi Trías se encuentran entre los diez mejores anotadores de la Liga. Cuentan con un bloque compacto, fuerte en todas sus líneas y que puede hacer daño en cualquier circunstancia.

«Para ganar hay que defender mucho y hacer lo que nos gusta, correr al contragolpe sin que el rival nos corte el ritmo como nos ocurrió contra Coruña. Caímos en la trampa que nosotros solemos emplear y eso nos frenó», finaliza Andreu Casadevall.