La obra de San Amaro, pendiente de la grada

BURGOS

Dos semanas tiene por delante la empresa adjudicataria para finalizar en tiempo y forma las obras de remodelación del campo de rugby de San Amaro. La instalación debe entregarse antes del 31 de diciembre, aunque el Ayuntamiento de Burgos opta por mantener los tiempos y sigue a la expectativa.

«Las porterías de fútbol 7 ya están instaladas y esta semana se pondrá el césped», explica la concejala de Deportes, una Lorena de la Fuente que evita entrar en más detalles. «La empresa todavía está en plazo», zanja la edil.El Ayuntamiento de Burgos sigue el plan inicial y centra su atención en las acciones programadas tanto en la zona de juego (césped artificial, mobiliario y sistema de riego) como en el perímetro (accesos e iluminación).De la Fuente descarga en la compañía los posibles contratiempos que surjan en torno a otros aspectos de las obras como los relacionados con la grada o los vestuarios, ya que se tratan de «mejoras» incluidas en el proyecto inicial planteado en su día por el Ayuntamiento.La administración local ha invertido 988.000 euros en esta iniciativa, la cual forma parte del programa de inversiones financieramente sostenibles y debe estar finalizada antes del inicio de 2016.