Una salida fatal para la Premier

EL ESCENARIOPreocupación por el negocio futuroNo es un asunto cerrado todavía, pero tanto la Federación Inglesa de Fútbol (FA) como los grandes clubs ingleses, que han defendido la permanencia en la Unión Europea, hace tiempo que aseguran que no habrá retroactividad en la aplicación de la nuevas normas, por lo que los jugadores que militan actualmente en las competiciones británicas, entre ellos los 31 españoles que juegan en la Premier League, no se verán afectados. En este nuevo escenario, y si la nueva normativa no tiene carácter retroactivo, los jugadores europeos que ya militan en las competiciones del Reino Unido pasarán a ser considerados extracomunitarios pero les será concedido de manera automática el correspondiente permiso de trabajo exigido para poder desarrollar su actividad profesional en sus respectivos clubs.La Premier no tiene fijado un número límite de futbolistas extracomunitarios o extranjeros como es el caso de la Liga española, cuyos clubs solo pueden inscribir tres extracomunitarios por plantilla. La gran preocupación del fútbol ínglés es ahora si la nueva situación condicionará el desarrollo económico y el interés de nuevos inversores por su fútbol, el más atractivo del planeta, como lo demuestra la venta de los derechos de televisión por el que la Premier ingresará 8.300 millones de euros en los próximos tres años. Según el director ejecutivo de la Premier, Richard Scudamore, la salida de la Unión Europea enviará un mensaje negativo a los inversores, lo que supondrá un menor volumen de negocio a corto plazo y más dificultades para fichar a los jugadores más cotizados.EL CAMBIORequisitos más duros para ficharEl proceso de adaptación durará dos años, pero a los nuevos futbolistas extracomunitarios europeos que quieran ingresar en la Premier se les aplicará de manera inmediata los requisitos que ya se venían aplicando: un 30% de partidos jugados con su selección en los dos últimos años si esta figura entre el los puestos del uno al diez del ranking FIFA, un 45% si la selección está entre los puestos 11 y 20, un 60% si la selección está entre los puestos 21 y 30 y un 75% de partidos jugados con su equipo nacional si está entre los puestos 31 y 50. Con esta fórmula, más de 100 jugadores no hubieran podido fichar la temporada pasada por clubs de la Premier si el brexit se hubiera aprobado hace un año, entre ellos los franceses Kanté (Leicester) y Payet (Wetst Ham), hoy puntales de la selección gala en la Eurocopa.Tampoco en su día hubieran podido integrarse en plantillas inglesas jugadores españoles como De Gea (United), Ander Herrera (United), Cesc (Chelsea), Bellerín (Arsenal), Monreal (Arsenal), Deulofeu (Everton) o Jurado (Watford). En Escocia, ninguno de los jugadores comunitarios que jugaron la pasada temporada en la Premier escocesa hubiesen podido hacerlo con la nueva situación planteada. Según un estudio de la BBC, el total de afectados en todas las ligas británicas ascendería a 441 jugadores. Se da la circunstancia de que el porcentaje de jugadores extranjeros aumenta considerablemente en los clubs más grandes, hasta el punto de que el Chelsea y el Manchester City solo contaron la pasada temporada con tres británicos entre los 25 inscritos y el Arsenal con seis.LA DUDA¿Qué pasará con Bale en el Real Madrid?El club blanco ya ha iniciado consultas para saber si su estrella galesa, Gareth Bale, pasará a ser considerado futbolista extracomunitario de forma inmediata o si no será así hasta el final de su contrato actual, que acaba en junio del 2019. El Madrid tiene la intención de ofrecerle la renovación hasta el 2023 y en el caso de que Bale pase a ocupar ya esta próxima temporada plaza de extracomunitario la entidad madridista tendrá que aligerar su nómina de extranjeros, ocupada por el colombiano James y los brasileños Casemiro y Danilo, ya que la normativa española solo permite tres jugadores extracomunitarios. En ese caso, la posibilidad de traspasar a James puede pasar a convertirse en un asunto prioritario para el Real Madrid, pese a que Zinedine Zidane prefiere seguir contando con él en la plantilla blanca. También afectaría a la hipotética llegada de Neymar, si es que Florentino Pérez se decide a mover ficha por la estrella azulgrana.EL FUTURONo podrán buscar jóvenes talentosAl dejar de formar parte de la UE el Reino Unido no podrá acogerse a la normativa de la FIFA sobre el Estatuto y la Transferencia de Jugadores, que solo permite la captación y el traspaso de futbolistas menores de edad, pero mayores de 16, entre los países que forman parte del espacio económico europeo. El fútbol británico ha sido especialmente activo en este aspecto en la última década y casos como los fichajes de jóvenes talentos como por ejemplo Gerard Piqué, Cesc Fábregas y más recientemente de Bellerín no serán posibles con la nueva situación. Por tanto, la demanda de jugadores ingleses crecerá de forma exponencial, lo que obligará a los clubs británicos a volcarse en el desarrollo de las canteras, una vieja aspiración de la Federación Inglesa de Fútbol, que ahora podrá fijar una cuota de canteranos en las primeras plantillas de los clubs, algo que la regulación europea le impedía llevar a cabo hasta el momento.LAS COMPETICIONES EUROPEASLos clubs podrán jugar la Liga de CampeonesLos clubs británicos podrán seguir participando en Europa como hasta ahora. No habrá ningún cambio en lo que respecta a su participación en la Champions League y la Europa League, las dos principales competiciones, como consecuencia de la salida del Reino Unido de la Unión Europea. De hecho, en los torneos que organiza la UEFA no hay distinción entre comunitarios o no, ya que en la organización del fútbol europeo están integradas 55 federaciones, incluidas las de Turquía, Kazajistán, Israel y Chipre. La Unión Europea pidió ayer mismo al Reino Unido que inicie el proceso de retirada del bloque comunitario cuanto antes para no prolongar «innecesariamente» una incertidumbre que podría afectar incluso a la disputa de la Eurocopa del año 2020. Londres fue elegida como sede de la final de la próxima Eurocopa, que se disputará en 13 ciudades europeas, entre las que también se encuentran Glasgow y Dublín.