El Coliseum llega justo a tiempo

BURGOS

El Ayuntamiento de Burgos también pasará su examen particular en el día de hoy. El alcalde, Javier Lacalle, empeñó su palabra al garantizar que el Coliseum cumpliría a tiempo con las exigencias marcadas por ACB. Sobre la bocina, la instalación saldrá al paso del problema.

Los técnicos y operarios aceleraron ayer para ultimar los detalles que rodean a la celebración del encuentro. Colocación de la publicidad y de otros elementos, limpieza de los vestuarios, instalación de los palcos y de la mesa de anotadores... nada puede fallar.

El Coliseum ya dispone de tres vestuarios (para los dos equipos y los árbitros). También tiene lista la zona reservada para el control antidoping y el botiquín. Suficiente para evitar problemas, pero queda mucho por hacer en el multiusos.

El cuerpo técnico del San Pablo Burgos asume las circunstancias que rodean a esta instalación, pero recuerda que la instalación aún presenta muchas deficiencias. «Lo único que espero es que la carrera por hacer de este pabellón el mejor de la liga Endesa no tenga esta meta y que a partir de este partido haya un punto y seguido», señala Epi.

El entrenador local defiende que se trabaje en nuevas mejoras, necesarias para el normal desarrollo de una actividad deportiva profesional. «Ni el Ayuntamiento ni el club deben considerar que esto ha acabado. Aún hay muchas cosas que mejorar y sé que están haciendo todo lo posible por lograrlo», subraya.

Además, los trabajos y la actividad desarrollada estas semanas han afectado al «día a día» de un equipo que solo ha completado una sesión en el Coliseum. Para colmo, «hay demasiado polvo en el ambiente» y «el miedo a resbalarse crea «ansiedad» en los jugadores.