FUTBOL Segunda División B
La tablas reinan en el derbi
Burgos y Mirandés volvieron a empatar a un gol en el duelo burgalés / Pito Camacho adelantó a los visitantes e Iker igualó en la segunda mitad
BURGOS CF 1 – 1 CD MIRANDÉSÁrbitro: Casanova Cudeiro (comité gallego). Mostró tarjeta amarilla al local Beobide, así como al viistante Kijera.
Goles: 0-1, min. 6: Pito Camacho. 1-1, min 80: Iker Hernández.
Burgos CF: Mikel Saizar, Andrés, Eneko Zabaleta, Borda, Julio Rico, Adrián Cruz, Jon Madrazo (Ramón Blázquez, min. 61), David Fernández (Manzano, min. 90), Adrián Hernández, Beobide y Carlos Álvarez (Iker Hernández, min. 61).
CD Mirandés: Limones, Paris Adot, Kijera, Prieto, Melli, Undarbarrena, Llorente (Gila, min. 59), Rúper, Pito Camacho, Borja Sánchez (Cervero, min 83) y Yanis (Igor Martínez, min. 73).La historia se repitió y al igual que sucedió en Anduva, Burgos CF y CD Mirandés empataron a un gol en un choque en el que no hubo demasiadas ocasiones y en el que mandó un equipo en cada periodo. Los rojillos aprovecharon su buen inicio del choque para tomar ventaja y dominar durante la primera media hora. Los visitantes pudieron sentenciar antes del descanso, pero el palo lo evitó.
El conjunto de Miranda cedió terreno en la segunda mitad y los capitalinos tomaron el timón. Su insistencia les permitió empatar e incluso soñar con la remontada en los minutos finales.
El punto no sirve a ninguno de los dos contendientes. Los de casa pierden más terreno con respecto a los puestos de privilegio, mientras que el Mirandés, que ayer tenía la oportunidad de recortar distancias con respecto al Sporting B, se quedó a mitad de camino.
El cuadro que entrena PabloAlfaro tuvo el partido en su mano, pero permitió que su oponente se recuperara y vio cómo en el minuto 80 se le escapaba el triunfo.
Hubo colorido en la grada y El Plantío registró una buena entrada. La marea rojilla disfrutó en la primera mitad, mientras que fueron los seguidores blanquinegros los que más empujaron en el tramo final. Los dos equipos tuvieron sus opciones, pero ninguno las supo aprovechar. Los de Miranda pudieron sentenciar en la primera mitad, aunque su excesiva prudencia en la reanudación les pudo haber costado la derrota. Pese a todo acabaron el choque de El Plantío con la sensación de que se habían dejado dos puntos en el camino.
BUEN INICIO
Fue el Mirandés el que mejor entró al partido y el que tuvo el control del juego en el inicio del choque. Los ayer visitantes aprovecharon la primera ocasión que crearon y se pusieron por delante en el marcador. Solo habían pasado seis minutos de partido cuando Yanis asistió a Pito Camacho. Julio Rico no pudo llegar al balón, el almeriense controló en el área pequeña y fusiló por bajo a Mikel Saizar.
El Mirandés tomaba ventaja en su primera llegada y al Burgos CF le tocaba remar contracorriente ante un rival con las ideas claras y al que el gol le aportó confianza y aplomo sobre el terreno de juego. Los blanquinegros acusaron el golpe y trataron de reponerse buscando la portería de Limones. Lo intentaron por banda izquierda y Madrazo, cerca del cuarto de hora de juego, puso un buen balón en el área al que no llegó Carlos Álvarez.
El juego se equilibró y el centrocampismo pasó a ser protagonista. El Mirandés estaba cómodo y no sufría para frenar los avances locales. A los de casa les faltaba contundencia ofensiva y no llegaban a asustar a un oponente bien plantado. El conjunto de Alejandro Menéndez combinaba con cierta fluidez, pero carecía de ideas en los metros finales. Faltaba profundidad por las bandas y los balones a los puntas llegaban a cuentagotas.
Los minutos fueron pasando sin que nada de interés sucediera sobre el césped de El Plantío. La pelea estaba en el centro del campo y ninguno de los dos equipos lograba imponer su fútbol. Sin embargo, cuando el partido estaba cercano al descanso llegó un nuevo susto. El balón llegó al área de Saizar desde la derecha y Yanis se aprovechó de un error defensivo para rematar a puerta. Por fortuna para los burgalesistas el balón acabó en el palo.
Se llegó al descanso con el 0-1 y con la sensación de que era el Mirandés el que tenía la sartén por el mango. Los blanquinegros necesitaban cambiar el guión del choque si no se querían ir de vacío del derbi.
La segunda mitad fue diferente. El Burgos CF dio un paso adelante y el Mirandés hizo justo lo contrario. Los rojillos se pertrecharon en su campo y buscaron la sentencia en las contras. El conjunto de casa llevó el choque del partido y mediante un fútbol combinativo buscó las cosquillas a su oponente, al que le costó pisar el área capitalina.
El Burgos CF quería. Iniciaba bien la jugada y llegaba con soltura a las inmediaciones de la portería de Limones, pero no tenía acierto en los últimos metros. No era capaz de crear ocasiones de verdadero peligro. Fue Madrazo el primero que avisó con un cabezazo que paró bien el guardameta rojillo, mientras que en el 70 Andrés lo intentó con un centro chut que no encontró la portería.
Los de casa insistían, aunque no acababan de poner en aprietos a su oponente, que se limitaba a nadar y guardar la ropa. Fue en el minuto 80 cuando llegó el premio para el Burgos CF.En una estrategia mal botada por Adrián Cruz, Ramón metió el balón al área, Prieto no acertó a despejar ante la presencia de Adrián y el balón le quedó a Iker en el área pequeña, que marcó sin oposición.
El decorado cambiaba y es que el conjunto de Menéndez estaba convencido de que podía dar la vuelta a la tortilla. Fue entonces cuando el Mirandés se volvió a estirar y pisó el área de Saizar, aunque no tuvo ninguna oportunidad de hacer el segundo.
Una llegada de Andrés por la derecha dos minutos después del gol se convirtió en una buena opción para un Burgos que acabó jugando en campo contrario.
Con el tiempo ya cumplido, los burgalesistas tuvieron una jugada de estrategia peligrosa a su favor y Adrián Cruz trató de sorprender con un golpeo que buscaba portería o una cabeza amiga que despistara a Limones. Sin embargo, en esta acción la defensa rojilla estuvo a la altura de las circunstancias y mandó el balón a saque de esquina, que el colegiado no dejó botar para pitar el final del choque.