Gutiérrez apunta alto

BURGOS

Cristina Gutiérrez habla con la serenidad y el aplomo de la experiencia. La burgalesa inicia la cuenta atrás previa a su cuarto Rally Dakar, una prueba a la que respeta con la misma humildad que el día de su estreno. Sin embargo, la evolución descrita tanto por la piloto como por el coche hacen que las expectativas sean muy diferentes a las del debut.

Aquel vehículo de serie que triunfó con el mero hecho de cruzar la última línea de meta cede el protagonismo a un prototipo del Mitsubishi Eclipse Cross adaptado para responder con las máximas garantías a una de las pruebas de navegación y resistencia más exigentes del calendario internacional. Y, desde luego, la cita con más solera.

Las dunas africanas cedieron el testigo los paisajes americanos y ahora Arabia Saudí recoge el testigo de la organización para presentar un recorrido favorable a las características de Gutiérrez y de su Mitsubishi.

Por delante, 12 etapas con solo una jornada descanso. Todos los participantes parten en igualdad de condiciones, puesto que el terreno del segundo bloque de la carrera será inédito por sus características. «Habrá sorpresas», avanza la deportista local.

Antes, Gutiérrez deberá aprovechar los continuos tramos de pista previstos en el recorrido. Este trazado permitirá a la piloto exprimir las virtudes de su Mitsubishi Eclipse Cross. «Son casi 2000 kilómetros más de recorrido cronometrado y será importante conservar la mecánica, pero en la primera semana iremos muy rápido y eso nos beneficia», destaca.

Gutiérrez ya ha tenido la oportunidad de exprimir el vehículo y de familiarizarse con las novedades incorporadas gracias a la implicación de su copiloto, Pablo Huete. La burgalesa asegura que el equipo está «muy contento» y reconoce que el rendimiento ofrecido es «espectacular». «Hemos reducido el peso y lo hemos distribuido mejor», señala. Ahora, el prototipo es «más estable y rápido», del «gusto» de los competidores encargados de llevar este proyecto al mejor puesto posible.

La 26 clasificada de la última edición en la general de coches tiene entre ceja y ceja alcanzar un puesto en el top 25 y asegura que la conjunción de todos los aspectos mejorados tanto en la preparación como en la parte técnica permitirá a Gutiérrez ser «más competitiva».

Los arreglos realizados en la suspensión y en las fibras, el cambio de motor y de frenos y las actualizaciones realizadas en la centralita ayudarán a la causa.

«Hemos probado en la Baja Aragón y también hemos realizado algunos tests en Teruel. Por falta de presupuesto no hemos podido ir a Marruecos, pero trabajaremos para tener una preparación más completa en el futuro», indica.

De momento, la burgalesa da por bueno el esfuerzo realizado durante el año y se siente lista para superar el desafío. «El trabajo está hecho», indica. La próxima semana embarcará todo el material rumbo a Arabia Saudí y a partir de ese momento Gutiérrez, junto al resto del equipo, preparán los últimos detalles previos a la carrera.