PRUEBA
Renault Captur 130 TCe Zen+. Todo un ganador
Su nueva imagen, mucho más madura y fresca, con una gran tecnología de seguridad y ayudas a la conducción, su gran ergonomía y habitabilidad interior, los nuevos estándares de calidad en su fabricación y configuración y la combinación con la mecánica más equilibrada de la gama, que aúna rendimiento y consumos aquilatados; nos han convencido.
Probamos la segunda generación del excepcional Renault Captur, un SUV pequeño, derivado del también renovado Renault Clio, que aumenta su rango de polivalencia con unas medidas compactas, un nuevo diseño muy atractivo y nuevas tecnologías de ayuda a la conducción y sistemas de seguridad activa y pasiva, algo en lo que la marca francesa siempre ha destacado.
Compacto, SUV y muy atractivo
Sus medidas son compactas, con 4,22 metros de longitud y una altura de 1,57 metros, lo que nos permite disfrutar de una muy buena habitabilidad englobada dentro de un "envase" atractivo y de medidas contenidas, convirtiéndose en un gran aliado en la ciudad. Obviamente, cuenta con una carrocería de tipo SUV, tan demandada en la actualidad y que aumenta las capacidades y el confort que podríamos tener en el utilitario del que deriva.
Adopta los, ya conocidos y característicos, faros delanteros con tecnología LED y las luces de iluminación diurna con forma de C invertida, aunque son más discretas que en los demás modelos de la gama francesa.
La parrilla delantera contiene el enorme logo de Renault en el centro, delimitado en su parte superior por una banda cromada con connotaciones meramente estéticas. El paragolpes delantero contiene sendas toberas de refrigeración laterales con los bordes cromados, otro radiador inferior con apliques en cromo también y una protección inferior en diferente color al de la carrocería, por si nos da por hacer una pequeña incursión campera.
En su vista lateral nos llama poderosamente la atención sus enormes llantas de 17", enmarcadas en unos pasos de rueda bastante marcados y voluminosos; y su tonalidad bitono, diferenciada entre el techo y el resto de la carrocería. La línea de cintura es de carácter ascendente.
Ya en la zaga observamos un diseño muy original, con unos pilotos de tipo LED que quieren emular a la C invertida de las luces diurnas del frontal, muy poderosa y con unos trazos muy dinámicos que acompañan al diseño espectacular del resto de la carrocería.
Espacio y habitabilidad suficientes
Abrimos el maletero y nos encontramos con un espacio de carga diáfano de 422 litros en el caso de que los asientos traseros estén en su posición más retrasada o, 536 en el caso de que esos asientos están en su posición más adelantada. Y es que los asientos posteriores cuentan con un carril por el que se pueden mover hasta en 16cm aumentando el confort de los ocupantes o bien, la capacidad del espacio de carga.
Los asientos posteriores son cómodos y nos ofrecen un buen espacio para dos ocupantes, con cotas muy buenas en altura, bien en anchura (aunque no destaca en esa cota) y muy bien respecto al espacio para las rodillas, siempre y cuando la banqueta esté en su posición más retrasada, situación en la que gozaremos de un espacio mucho más que aceptable, teniendo en cuenta su compacidad.
Las plazas delanteras nos parecieron también muy confortables, con unos asientos que recogen muy bien nuestro contorno, pero no destacan por tener una soberbia sujeción lateral, tan sólo suficiente.
Ergonómico y tecnológico
Lo que más llama la atención al montarnos, es uno de los gadgets que incorporan todos los Renault de última hornada, que no es otro que la pantalla del equipo de infoocio de 9,3" (en este caso la más grande) situada de manera vertical, táctil y con con la más reciente generación del sistema operativo que en el seno de la marca denominan Easy Link.
Desde ahí podremos ver y controlar la inmensa batería de gadgets y equipamientos que montaba nuestra unidad de prueba en concreto. Por ejemplo, disponemos de navegador con definición de rutas según el tráfico en ese momento o las imágenes de la cámara de ayuda al aparcamiento trasera, con una nitidez muy reseñable. Desde ahí también podremos actuar sobre el sistema Multi-Sense, con cuatro modos de conducción distintos a elegir que interfieren en la respuesta del motor o la dureza de la dirección y son: Normal, Sport, ECO y My Sense.
La calidad de ajustes y materiales utilizados, ha pegado un salto cualitativo importante respecto a la generación anterior y la disposición de los mandos es muy ergonómica.
Otra de las peculiaridades de nuestro modelo de pruebas, es la posición del selector del cambio automático de 7 relaciones, ya que es un selector de tipo joystick, muy pequeño, que nos permite disponer de una consola flotante y por ende, de un hueco adicional entre los dos asientos, además de estar en una posición elevada y muy cómoda para accionar y actuar sobre los cambios.
Gran equipamiento
Este cambio tan especial, está siempre relacionado a los modelos con el acabado Zen+ y también, a los modelos de gasolina más poderosos de 130 y 155cv. Ese era uno de los casos de nuestra unidad, así que disponíamos de un equipamiento de bandera que incluía navegador, climatizador automático, lector de señales de tráfico, aviso de cambio involuntario de carril, alerta de distancia de seguridad, control de velocidad de crucero adaptativo, asistente de arranque en pendiente, Multi-Sense con 4 modos de conducción, equipo de infoocio con pantalla táctil de 9,3 pulgadas, llantas de 17 pulgadas, ordenador de a bordo, luces LED inteligentes con cambio automático de cortas a largas, cámara trasera de ayuda al aparcamiento, sensores de aparcamiento delanteros y traseros, sensores de lluvia y luces, sistema de llamada de emergencia, control de presión de neumáticos, apertura y arranque sin llave y por botón, freno de mano eléctrico, volante calefactado, sistema de reconocimiento de voz o Start-Stop de serie, entre otros muchos elementos.
Configuración equilibrada
El motor que tuvimos la fortuna de probar es el 1.3 de gasolina que genera 130cv, con un par máximo de unos, más que aceptables, 240Nm, asociado a un cambio automático de doble embrague de 7 relaciones con levas detrás del volante. Con esa base, nuestro Captur es capaz de alcanzar los 195 Km/h de velocidad máxima, hacer un 0-100 Km/h en 9,6 segundos y homologar un consumo en ciclo mixto de 6,2 l/100 Km. Es un motor silencioso y muy solícito a nuestras ordenes con el pedal del acelerador.
Ganador
Su nueva imagen, mucho más madura y fresca, con una gran tecnología de seguridad y ayudas a la conducción, su gran ergonomía y habitabilidad interior, los nuevos estándares de calidad en su fabricación y configuración y la combinación con la mecánica más equilibrada de la gama, que aúna rendimiento y consumos aquilatados; nos han convencido.
Datos técnicos
Motor
: 1.3 TCe
Potencia
: 130cv
Vel Máx
: 195 Km/h
Acel 0-100
: 9,6 seg
Cons
: 6,2 l/100 Km
Precio
: Desde 25.200 euros (Versión probada)