Hasta el último segundo
San Pablo y Fuenlabrada se tomaron muy en serio el primer partido de preparación con una intensidad que llegó literalmente hasta el último segundo / Una canasta de Kravic dio la victoria
El San Pablo venció anoche en su primer partido de preparación de esta pretemporada contra Fuenlabrada gracias a una canasta de Dejan Kravic a falta de sólo 9 décimas para el final del encuentro. Un lanzamiento desde abajo que se coló con fortuna, con el añadido de un tiro libre por falta sobre el pivot burgalés, uno de los baluartes ayer en el ataque local, para poner el 94-92 en el marcador de El Plantío.
Una canasta afortunada del jugador serbio-canadiense en el último instante de un último cuarto desconcertante para el San Pablo, con Benite fallando triples ganadores, fallos claros de defensa, precipitación y balones perdidos. La serenidad que el equipo de Zan Tabak había encontrado en el segundo cuarto se esfumó en la segunda parte del tercer acto y faltó por completo en el último. Mérito también de un Fuenlabrada que tuvo más piernas que los azulones, especialmente al final del encuentro.
El encuentro de anoche debía servir para probar al nuevo equipo en condiciones reales de competición y ese escenario lo puso a la perfección Fuenlabrada que salió a la cancha con una velocidad que superó claramente a la defensa burgalesa y anuló el ataque. La intensidad de Fuenlabrada desbordó hasta tal punto a los de Tabak que Vitor Benite ya contaba con tres faltas personales a los cinco minutos de partido. Los madrileños castigaron desde el perímetro a la zona burgalesa.
Poco a poco, con un ritmo de rotaciones acertado, Tabak dio con la clave y el equipo empezó a construir su juego de atrás hacia adelante con una mayor concentración en defensa, con un control del balón reforzado con momentos de dos jugadores actuando como bases y un acierto ofensivo que faltó en los primeros minutos.
El segundo cuarto dejó ver las buenas bases de este nuevo proyecto del San Pablo con Tyrus McGee al timón auxiliado por un Adam Somogyi que dejó muy buena impresión tomando la responsabilidad y dirigiendo el juego con soltura. Con un Nikolic que mostró su gran calidad y las aportaciones de Zack y Braimoh, el Fuenla se fue quedando atrás. La defensa funcionó como un reloj con un sobresaliente Xavi Rabaseda dando muestras su capacidad de trabajo a ambos lados de la cancha y con buenos momentos de Dani Díez y Marc García, tanto en la contención de los ataques del Fuenla como desde la línea de 3. Buenas sensaciones que no tuvieron continuidad en el último tramo, con el cansancio haciendo mella.
Con el equipo progresando adecuadamente en defensa y ataque, sin acusar los cambios en las obligadas rotaciones en un partido de pretemporada, el marcador se fue al descanso hasta los 60-41. En el tercer cuarto se repitió la misma pauta, pero empezaron a verse las costuras propias de un proyecto que sólo está hilvanado con dos semanas de trabajo.
Se echaron en falta los automatismos que la temporada pasada protagonizaban Kravic y Renfroe en el bloqueo y continuación o las transiciones más ordenadas. Aún así, el San Pablo se mantuvo muy por delante en el marcador con una buena defensa y forzando errores, gozando, incluso, de numerosas segundas oportunidades tras los tiros fallados. En la segunda mitad de tercer cuarto esos fallos empezaron a abundar con canastas erradas, balones perdidos, confusión de ideas en ataque y una mayor permeabilidad en defensa que permitió al Fuenla anotar bajo el aro con más facilidad.
Aún así, se llegó al último cuarto con 14 puntos de ventaja que se fueron reduciendo hasta que el Fuenla se pudo por delante a falta de dos minutos y medio tras un parcial de 0-12.
Fueron los peores minutos de los locales, que sufrieron una pájara física pero también un déficit de concentración que se prolongó hasta el final del encuentro con muchos nervios al final y muchas correcciones del técnico croata que confió en el último tramo del encuentro en un cinco formado por Nikolic, Benite, Rabaseda, Kravic y Braimoh que apunta a ser el eje básico del juego burgalés.
Nikolic asumió el mando y puso más serenidad en el juego, con un Rabaseda enorme en defensa, buscando opciones abriendo el campo hacia su tiro en la esquina y asistido por Kravic. El serbio canadiente sacó sus galones de veterano en los últimos momentos. Lo mismo que Benite, que se jugó dos triples que hubieran dado una victoria más holgada, aunque en esta ocasión salió cruz. Una canasta del Fuenla tras un error defensivo dejó el empate en el marcador y tuvo que ser Kravic quien a falta de 9 décimas lograse la victoria.
Buen partido en general para los azulones, que mostraron menos defectos como bloque que en el rendimiento individual de los nuevos jugadores. El próximo ensayo será este viernes ante el Retabet Bilbao desde las 19:30h en Gijón.
ÁNGEL INFANTE RENUEVA
LIGA EBA. Ángel Infante permanecerá una nueva temporada en las filas del Nissan Grupo de Santiago, filial del Hereda San Pablo Burgos en la liga EBA, donde estará dirigido por José Luis Cubillo ‘Cubi’. El propio jugador ha sido el encargado de darlo a conocer a través del canal de Twitch del club, por el que se retransmitió ayer el partido. Este será el segundo curso en la entidad para el joven burgalés, que en la pasada temporada compartió entrenamientos y partidos con el primer equipo con el l que participó en la Copa del Rey acb y alzó la FIBA Intercontinental Cup en Buenos Aires.