Una final en pleno diciembre

Aún no ha terminado la primera vuelta y el Hereda San Pablo ya encara un tramo del calendario decisivo para remontar el vuelo a tiempo. Los próximos encuentros ante el Obradoiro y el Betis marcarán en gran medida el destino de los locales a corto y medio plazo. De momento, el vestuario centra todas sus energías en superar al conjunto gallego en la complicada visita al Fontes do Sar de Santiago (18,00 horas).El triunfo logrado ante el Besiktas en Europa alivia a un equipo que debe habituarse «a competir, a ganar y a perder» sin dejarse llevar por las emociones. «La ventaja de jugar de partidos tan seguidos es que los ánimos no son duraderos», señala un Salva Maldonado que valora la reacción de sus pupilos.«Es cierto que lo del sábado ante el Murcia fue duro porque queríamos ganar en casa y el partido no salió como queríamos. El equipo estaba dolido y eso es positivo. Después, el martes ofrecimos otro nivel en otra competición», apunta, para reconocer que llegan momentos «vitales».El encuentro de hoy es «importante», como lo será el «break» a aprovechar en BCL ante el Rytas el próximo día 21 y como lo será el duelo frente al Betis del día 28. «Vamos a pensar primero en el Obradoiro», zanja. «Nuestra situación es incómoda», recuerda, porque «el equipo, la afición y el club no están habituados a ella y hay que afrontarlo». ¿Cómo se consolida la recuperación? «Jugando bien y ganando», resume. Para ello, «hay que mantener la calma y la serenidad para aplicarte en el partido y sacarlo».Los burgaleses reciben con las brazos abiertos a Vitor Benite después de que el capitán se perdiera los últimos dos partidos oficiales por una lesión muscular. «Ya ha empezado a hacer cinco contra cinco y podrá ayudar. También es importante», explica Maldonado, quien asume de nuevo la baja de un Dani Díez que no llegará a tiempo. De hecho, el madrileño aún no trabaja con el grupo.El Hereda San Pablo transmite confianza a pesar de encontrarse en un escenario muy delicado en la previa de su cruce contra el Obradoiro, un equipo «que está jugando bien» aunque su casillero de victorias sea idéntico al de los burgaleses con un partido pendiente.«Ha cambiado. Antes era un equipo reconocible, diferente al resto y ahora juega de otra manera. No es ni bueno ni malo. Digo que es diferente», analiza el preparador burgalés antes de destacar el rendimiento del rival en casa. «Han hecho los deberes. Es una pista en la que si quieres ganar debes hacer un buen encuentro que valga la pena», señala.Afortunadamente en este caso, el Hereda San Pablo ha mostrado un «mejor nivel» lejos del Coliseum, un aspecto que Maldonado destaca antes de encarar el problema del Coliseum cuando toque.Los azules viajaron a Santiago «con la moral alta y dispuestos a cambiar su trayectoria. «No voy a hacer un gran análisis de la situación», aclara Maldonado, consciente de las urgencias a resolver. «No hemos encontrado el feeling en liga. Se empezó perdiendo y ha creado un momento incómodo. Somos el peor equipo de la liga en casa con el Betis», recuerda. Con todo, el catalán asegura que el grupo tiene «confianza en su juego» y no quiere añadir presión a su equipo. «Hay que aceptar la situación y ponerle remedio jugando bien para ganar», concluye.