VRAC 40 - 34 Aparejadores
El final más cruel para el Aparejadores Burgos
Los gualdinegros caen ante el VRAC en la épica prórroga del Pepe Rojo. Los entrenados por José García y José Basso dieron una exhibición defensiva, que no fue suficiente para detener al doce veces campeón de la División de Honor
Aparejadores Burgos rozó con la punta de los dedos el título de la División de Honor, pero como ya hizo en otras 11 ocasiones, este se marchó a las vitrinas del VRAC Quesos Entrepinares. Los gualdinegros cayeron en el Pepe Rojo, en un auténtico partidazo, que se decidió en la prórroga. Aunque la gloria fue para el cuadro vallisoletano, y hoy el Recoletas Burgos Universidad de Burgos llora, la final de este sábado pone el cierre una temporada histórica. El rugby ya le debe otra.
Con la patada del capitán gualdinegro comenzó la final. Que las dos escuadras se tenían ganas no era ningún secreto y ya en el minuto 2 de juego llevaron la lucha a la melé. El primer asalto en la estática fue para el VRAC. También en los puntos, ya que fueron los queseros los primeros en visitar la línea de marca y transformar golpeando en el palo (7-0, min. 6).
El inicio de los vallisoletanos fue arrollador, robando y ganando fases. Pero Burgos no se amedrentó y ante la imposibilidad de penetrar en la fuerte defensa local, optó por intentar sumar sus primeros puntos con una patada de Zabalegui desde 40 metros. Sin embargo, el infalible burgalés, esta vez, erró en su golpeo.
Un robo dentro de la 22 acercó a los visitantes a su primer ensayo, pero el VRAC resistió de forma estoica y desbarató la acción para mantener su marcador impoluto, superados ya los 20 minutos de juego.
El 11 local, Cian, dejó una de esas acciones brillantes, pero difíciles de ver en una final. El tres cuartos quesero lanzó una carrera directo a la H, dejando por el camino a dos gualdinegros con cambios de ritmo y varios contra pie que levantaron al Pepe Rojo. Aunque al final, fue interceptado a cinco metros de la marca.
Con un VRAC tan dominador del oval, el Recoletas Burgos Universidad de Burgos lo fio todo a la defensa. Una versión pocas veces vista en los gualdinegros, pero que sirvió para secar a los locales e incluso recuperar la posesión.
Cerca de la media hora de juego, Aparejadores se lanzó a la carga con una patada y a correr de Feta Casteglioni que ganó metros y provocó el avant del VRAC. En la puesta en juego, el conjunto burgalés, más concretamente el internacional Tani Bay sumó sus primeros puntos con un ensayo centrado. La patada sencilla de Zabalegui igualó el encuentro (7-7, min. 32).
La primera marca burgalesa espoleó al conjunto cidiano que volvió a pisar el campo contrario con una patada larguísima. El VRAC se achantó ante la avalancha burgalesa y concedió una touch en su propia línea de 22, que terminó con el segundo ensayo burgalés. Facundo López resistió un doble placaje en los últimos metros para posar sobre la línea y adelantar a Burgos. Carrió, algo escorado, logró la transformación. (7-14, min. 38)
Ya por delante en el marcador, Aparejadores se esforzó por conservar la renta al inminente descanso. No sin esfuerzo, el conjunto de García y Basso se retiró a los vestuarios con los siete puntos de ventaja que otorgó el segundo ensayo transformado (7-14), a pesar de que Huber consiguió traspasar la línea de marca con el oval controlado, pero este se le escapó antes de tocar tierra. Todo abierto para el segundo periodo.
La segunda mitad arrancó como el primer tiempo, con el ensayo del VRAC, el segundo en su cuenta. El capitán Gavidi finalizó un gran intervalo por la derecha, que se encargó de transformar Taibo para empatar el partido. (14-14, min. 44)
Burgos encajó bien el golpe y tomó de nuevo la delantera con el efecto Carrió. El capitán encontró el espacio por el centro de la línea vallisoletana para habilitar a Tani Bay y sumar cinco puntos más (14-19, min-50).
La defensa de los gualdinegros en la reacción fue clave para detener toda opción de puntos. Como la fase regular de la temporada, la generosidad y la consistencia durante los 80 minutos de juego fue una de las piedras angulares de este Recoletas Burgos Universidad de Burgos, al que sólo le restaban 20 minutos para ganar su primer título de liga.
Tratando de evitar que como en la final de Copa el partido llegara vivo a los instantes finales, Tani Bai imprimió un ritmo extra en la circulación del oval. Un plan que permitió al UBU jugar en campo rival y mantener alejado al VRAC de la zona de puntos. No obstante, los vallisoletanos encontraron una fisura en la defensa gualdinegra para elevar las pulsaciones del Pepe Rojo.
Sobre la línea de marca, Burgos se defendió con uñas y dientes hasta que Stringer consiguió el empate. Una igualada que no fue tal porque el videoarbitraje advirtió de un adelantado previo que invalidó la acción de los locales. Entonces, la batalla se trasladó a la melé sobre la línea de ensayo burgalesa. Allí, la defensa gualdinegra resistió contra viento y marea hasta que Tomi Carrió despejó el peligro enviando el cuero a la línea de banda.
A diez para el final, el VRAC regresó a la línea de 22 por el costado izquierdo y la insistencia tuvo su premio con el ensayo de Moala y la patada de Taibo que le devolvía la iniciativa al campeón de la Copa (21-19, 74’). La contestación de Burgos no se hizo esperar. Centimetro a centímetro, los gualdinegros trataron de llegar a la 22 del rival. Las fases se sucedieron hasta que Noah Cánepa encontró el espacio por el centro para ganar 10 metros y llevar a Nico Rocaries hasta un costado diestro más despejado. El medio melé aprovechó los espacios y su agilidad para romper la cintura a su par y adelantar de nuevo al Aparejadores (21-26, 78’).
A partir de ahí, Burgos se enfrentó a sus fantasmas, porque el VRAC gozó en los últimos minutos de la misma acción que le dio el triunfo en la Copa del Rey. Burgos impuso su defensa, pero al final, con uno menos sobre el césped, el gigante empató el partido con un nuevo ensayo y llevó el duelo a la prórroga (26-26).
PRÓRROGA
Durante los primeros diez minutos de añadido, ambos conjuntos trataron de mantener el oval lejos de su zona de influencia. Un juego conservador tan sólo roto por los intentos de contragolpe que las fuerzas permitían. Los errores se sucedieron en las dos escuadras y el partido entró en una fase en la que solamente los jugadores especiales saben estar. Uno de ellos fue el capitán, Tomi Carrió para dirigir una contra por la izquierda y regalarle el ensayo a Nico Rocaries (26-31, 89’).
Como ya sucediera al final del tiempo reglamentario, el VRAC pisó los terrenos de ensayo en el tramo final hasta conseguir el empate (31-31). Para colmo, Taibo convirtió la patada (33-31) y el Aparejadores se quedó con un hombre menos por la amonestación a Noah Canepa.
En inferioridad, los gualdinegros sucumbieron ante el empuje vallisoletano que aprovechó la circunstancia para encontrar un nuevo ensayo que a la postre sería definitivo (40-31). Carrió se echó el equipo a la espalda a la desesperada y aunque redujo la diferencia a 6 puntos con una patada certera, el 10 gualdinegro no pudo acercar a su equipo al título que se marchó por 12ª vez a las vitrinas del VRAC Quesos Entrepinares.
VRAC Quesos Entrepinares 40 - 34 Aparejadores Burgos
Recoletas Burgos Universidad de Burgos: Vázquez, Gil, Gramajo, Wagenaar, Walker, Sanz, Suárez, Bustos, Tani Bay, Tomi Carrió, Coronel, Zabalegui, Rascón, Facundo López y Feta Casteglioni.También jugaron: Caini, Silvestre, Pechia, Sacovechi, Zumeta, Rocaries, Núñez y Cánepa.
Árbitro: Iñaki Muñoz.
Tanteo: 7-0, min. 6: ensayo de Stringer, que transforma Taibo; 7-7, min. 32: ensayo de Tani Bay que transforma Zabalegui; 7-14, min. 35: ensayo de Facundo López que transforma Carrió -descanso- 14-14, min. 43: ensayo de Gavidi que transforma Taibo; 14-19, min. 50: ensayo de Tani Bay; 21-19, min. 73: ensayo de Moala que transforma Taibo; 21-26, min. 76: ensayo de Nico Rocaries que transforma Carrió; 28-26, min. 80: ensayo de Alonso; 26-31, min. 89: ensayo de Nico Rocaries; 33-31, min. 95: ensayo de Potgietter que transforma Taibo; 40-31, min. 96: ensayo de Lainz que transforma Taibo; 40-34, min. 97: golpe de castigo de Carrió.