El Mirandés tumba la racha del Oviedo y asegura los tres puntos en casa

El CD Mirandés hizo morder el césped de Anduva a un Real Oviedo que llegaba a tierras burgalesas sin perder en los últimos dos meses. Los carbayones fueron superiores en el primer tramo del partido pero el Mirandés marcó en su primera llegada y después hasta el descanso se vería un choque muy abierto y entretenido. 

Aunque todavía más lo sería en una segunda mitad donde los rojillos tuvieron ocasiones de sobras como para sentenciar, pero no lo hicieron y a falta de cinco para la conclusión el equipo de Luis Carrión empataba en la única clara que tuvo y para disgusto de todo Anduva. 

Sin embargo en esta oportunidad la suerte estuvo de lado local y en el último minuto Ilyas Chaira con un afortunado gol hizo justicia al gran partido del equipo de Alessio Lisci.

El duelo se inició con Martón presionando hasta el portero carbayón y animando a sus compañeros a seguirle hasta el final. Toda una declaración de intenciones por parte de un Mirandés que siempre mira hacia arriba, ante un Oviedo especialmente brillante en lo defensivo y que llegaba a Anduva sin conocer la derrota desde el 24 de septiembre pasado, lo que sin duda le hacía un rival temible.

Sin embargo, el primer cuarto de hora del choque se jugaría bajo una clara posesión de los asturianos y con su portero Leo Román dando una lección magistral de juego con los pies y ejecutando una variedad de pases digna de elogio.

En este tramo el Mirandés no encajó siquiera un acercamiento pero la pelota apenas le duraba unos segundos en su poder y eso lo obligaba a correr mucho más que su oponente. Hasta que en 18´ después de una buena jugada colectiva de toque el foráneo Lucas se mete en el área con la pelota controlada y su peligroso centro lo despeja a la esquina un zaguero burgalés.

Después el equipo del entrenador visitante Luis Carrión mantuvo el férreo control del partido de antes, pero ya no con tantísima posesión pues los burgaleses recurrieron a Ramón Juan para dar salida al cuero y un estirado Oviedo, que apretaba hasta el fondo, dejó más espacios para la combinación de los locales. 

Así, en el 26´ el Mirandés consigue hilvanar varios pases seguidos y tras una pared en el área de Martón con Chaira éste cede al costado de Gabri Martínez, que por detrás del área grande la pone a pierna cambiada al palo corto para que Martón llegando en velocidad se adelante a su par y con la punterita bata al meta asturiano Leo Román. Los de Alessio Lisci exhibían pegada marcando en su primera llegada.

Pero la alegría pudo durar muy poco porque cuatro minutos más tarde en un centro visitante sin peligro Ramón Juan en pleno salto choca con un par de compañeros y su puño en alto envía el balón en dirección a la portería, teniendo que llegar un compañero para sacarla bajo palos a la banda, donde Paulino se va perfecto de dos rivales y cuelga un gran balón que Borja Bastón está a punto de aprovechar. 

El choque se animaba y en el 34´ Martón pone un centro precioso y muy peligroso con el exterior que la defensa blanquiazul saca a córner con apuros ante la llegada al segundo palo de un atacante jabato. No había duda, desde el gol se había dado el pistoletazo de salida a una animada fase de ida y vuelta constante que duraría hasta el descanso para disfrute de la grada pese a que ya no se vieran más goles ni ocasiones realmente claras.

Tal y como había acabado la primera comenzó la segunda, con la pelota yendo de área a área en acercamientos no del todo claros y con el recién ingresado Moyano mostrándose muy incisivo en la banda izquierda del ataque carbayón. 

El encuentro cada vez estaba más interesante y el más necesitado, el míster foráneo Luis Carrión, no se guardaba nada metiendo a la hora un doble punta y dejando en el césped a tres de sus cuatro defensas con cartulina amarilla.

Con todo muy abierto y el Oviedo tomando riesgos, poco más tarde el Mirandés robaba en salida rival e Ilyas Chaira probaba el chut desde la frontal que detuvo Leo Román sin problemas. Un minuto más tarde tras un nuevo robo Rubén la colgaba desde el costado derecho al segundo palo y el remate de Gabri Martínez llegando en carrera al área chica pero junto a la línea de fondo se paseaba por línea de gol.

Emoción en el último tramo

 Los burgaleses estaban generando más y mejores pero sin un segundo gol la incertidumbre se mantendría hasta el final, porque los asturianos no renunciaban a nada pese a jugar en lo táctico en el filo de la navaja y de hecho a falta de veinte para la conclusión Carrión agotaba todas sus ventanas de cambios.

Justo entonces Alessio Lisci movió su primera pieza, un Lachuer que lo primero que hizo fue soltar un tremendo disparo que se marchó lamiendo un poste. El Mirandés volvía a rozar el gol y de hecho seguiría generando más oportunidades ante un Oviedo que no llegaba nada pero que seguía vivo con ese resultado.

Todo un peligro ante un rival como el asturiano, como se demostró en el 85´ cuando un centro sin aparente peligro de rosca al área le cae a un Barcia que no es contundente en el despeje y la pelota muerta le cae a Borja Bastón, que no perdona y silencia a todo Anduva.

Lisci metió entonces su último doble cambio y el Mirandés intensificó su acoso. Así uno más tarde un cabezazo forzado de Alberto Reina sacó el ´uy´ de la grada, y a falta de dos un disparo de Juan María lo saca a la esquina Leo Román con una gran parada. 

Pero en el consiguiente córner la defensa visitante despeja a la frontal e Ilyas Chaira caza una volea al vuelo que afortunadamente toca en Calvo despistando a un Leo Román que sólo puede mirar como el cambio de dirección lleva el cuero de fuera de palos directo a sus redes. La diosa fortuna se aliaba con los jabatos y hacía justicia.

Con todo no habría festejo hasta el final pues en ese último minuto y los nueve de descuento los once rojillos tuvieron que defenderse como jabatos ante un rival carbayón con las mismas pocas ideas ofensivas de toda la segunda mitad pero igual de temible que siempre.