El Tizona se carga las pilas a costa de un Fuenlabrada que se llevó un revolcón

Octava victoria de la temporada. Fue un triunfo cómodo donde los burgaleses siempre mandaron en el marcador ante un Baloncesto Fuenlabrada que no rindió al nivel que se esperaba. Los de Diego Ocampo fueron de menos a más y al final del tercer cuarto ya habían sentenciado el partido. Y es que los locales dominaron todas las facetas del juego.

El partido empezó más tarde de la hora indicada por una incidencia en una de las canastas. Y cuando arrancó el partido, el Baloncesto Fuenlabrada no lo hizo de la mejor forma. Un 8-3 fue un claro indicativo que los burgaleses habían entrado más enchufados en la pista del Plantío. 

El ala-pívot Rodrigo Seoane estaba siendo una auténtica pesadilla para la defensa visitante ya que fue el autor de los ocho primeros puntos locales. Un triple del pívot Van Zegeren calmó los ánimos en las filas madrileñas (8-5). Un parcial de 8-2 volvió alejar al Tizona Burgos en el marcador (16-7). 

A Toni Ten, técnico del Baloncesto Fuenlabrada, no le quedó más remedio que pedir el primer tiempo muerto para reconducir la situación. Se pasó por el ecuador del primer cuarto con el marcador 16-8. Un triple de Moreno acercó a los madrileños aún más (16-11). Las diferencias continuaron apretándose (20-17) lo que dejaba claro que los de Diego Ocampo lo estaba pasando mal en los últimos tres minutos. 

A base de triples, el Baloncesto Fuenlabrada había recobrado la credibilidad. Díaz situó el 22-20 a 1´26´´ para el final. Un triple de Böhom firmó el definitivo 28-23 e hizo estéril el que convirtió segundos antes Aranitovic.

Ya en el segundo cuarto, el periodo empezó como terminó el primer, con un triple de Böhm (31-23). Sin embargo, Sy y Aranitovic devolvieron la igualdad en el luminoso (33-29) Un triple del senegalés Sy situaba el 33-32 en El Plantío en un momento de máximo acierto visitante. Böhm volvió a salir al rescate del Tizona Burgos con un lanzamiento lejano (36-32). 

El Baloncesto Fuenlabrada volvió a tirar de Sy y Aranitovic para mantener las mínimas ventajas (36-32). Pero los triples siguieron bombardeando el aro visitante. Un triple de Seoane forzó un nuevo tiempo de Ten, que buscó ordenar su defensa para dificultar los tiros lejanos burgaleses que estaban haciendo realmente daño a su equipo. Pero no fue efectivo.

El senegalés Thiam colocó el 46-38 a falta de poco más de tres minutos para el descanso. Y el mismo jugador aumentaba la renta para su equipo (49-38). 

El Tizona Burgos había recuperado su mejor versión. Los continuos cambios realizados por Toni Ten no estaban dando los frutos esperados por el técnico del conjunto madrileño. La máxima diferencia llegó a ser de 15 puntos coincidiendo con el final de la primera parte (55-40). Seoane, con 13 puntos, lideraba el ránking anotador local.

Tras el paso por los vestuarios, el Baloncesto Fuenlabrada siguió atascado en su juego. Así un parcial de salida de 8-2 elevó su desventaja hasta los 21 puntos (63-42) coincidiendo con un triple de Parrado. La superioridad burgalesa era total. Ten tuvo que detener el partido con un tiempo muerto y mover el banquillo. 

Pero Cremo se encargó de destruir cualquier opción de reacción con un triple (69-44). Parecía que el duelo ya estaba sentenciado. Sin embargo, un parcial de 0-9 (69-53) revivió a un Baloncesto Fuenlabrada que parecía ´muerto´. Fue un puro espejismo (76-54). En los dos últimos minutos del periodo el resultado lo debaja todo muy claro con el 81-57. Al final, 85-58.

Restaban diez minutos, pero la victoria ya tenía dueño. La máxima diferencia llegó a ser de 33 puntos (91-58), con un Baloncesto Fuenlabada totalmente hundido y sin capacidad de respuesta. Y aún restaban más de ocho minutos para el final. En el ecuador del último cuarto el marcador era de 99-65. Un triple de Jofresa permitió al Tizona Burgos superar los cien puntos (102-65). Alonso, con un triple, anotó el definitivo 119-77 a falta de 19 segundos. Un marcador NBA.