El Tizona cae contra un rival directo en un choque con muy poco acierto

Grupo Ureta Tizona Burgos desaprovechó una ocasión de oro para dejar atrás a un rival directo al que le tenía el average ganado. Los de Diego Ocampo cayeron en casa en un encuentro muy trabado que ICG Força Lleida ganó gracias a su tranquilidad en los minutos finales para igualar a victorias a los burgaleses y apretar la tabla.

Locales y visitantes saltaron a la cancha decididos a no dar facilidades al rival, con defensas muy intensas. Las muñecas frías y las posiciones de tiro ´obligadas´ acababan derivando en un carrusel de fallos a la hora de lanzar del que, de inicio, salió vencedor un Grupo Ureta Tizona Burgos que conseguía adelantarse con un triple de Cremo y dos tiros libres de Díaz (5-0).

Pero antes de que los equipos acabasen de entrar en calor el partido se detuvo por un problema con el marcador, un parón que le sentó mejor a ICG Força Lleida, que a la vuelta conseguía firmar un parcial de 2-10 que dejaba el luminoso en 7-10 (minuto 5).

Los catalanes habían conseguido corregir sus errores en el lanzamiento, pero los burgaleses seguían fallando. No perdieron los nervios los de Diego Ocampo, que poco a poco se fueron entonando, dandole la vuelta al marcador en poco menos de dos minutos (14-12). A partir de ahí, el partido se abría, las defensas pasaban a un segundo plano y el ritmo de idas y venidas aumentaba considerablemente.

Aumentó también el porcentaje de aciertos de unos y otros a la hora de encarar el aro contrario y los últimos tres minutos del cuarto se saldaban con un parcial de 11-9 que dejaba el luminoso en 25-21.

Garmine Kande elevaba a seis la ventaja local al inicio del segundo cuarto (27-21). ICG Força Lleida reajustaba su defensa y cortaba de raíz el juego ofensivo de los burgaleses, mientras se encomendaba al acierto de Lobo que, con cinco puntos consecutivos, apretaba el electrónico (27-26).

Movía el banquillo Ocampo, que en menos de un minuto cambiaba todas las piezas en pista. Grupo Ureta Tizona Burgos apretaba los dientes en defensa, y entre unos y otros el marcador estaba casi dos minutos sin moverse, lo conseguía por fin Jofresa para los locales, pero su canasta era una gota de agua en medio de la sequía y un tiro libre de Parrado ponía el 30-26.

Tampoco ICG Força Lleida conseguía acertar y los primeros cinco minutos del cuarto se saldaban con un 5-6 de parcial (30-27). Solo desde la línea de tiros libres conseguían unos y otros ir moviendo poco a poco el marcador. Ocampo se desesperaba y con el 32-30, a 4 minutos del descanso, paraba el partido.

A la vuelta, Vilà anotaba la primera canasta en juego de los burgaleses después de cuatro minutos y medio, y un triple de Böhm daba aire a los burgaleses (37-31) dando paso a dos minutos finales con algo más de emoción y acierto que dejaban el marcador en 39-35 al descanso.

Salió mucho mas entonado tras el descanso Grupo Ureta Tizona Burgos, que con una canasta de Seoane y un triple de Cremo se iba de 9 puntos (44-35). No tardó demasiado en replicar ICG Força Lleida y el partido se mantenía igualado, aunque ahora con los ataques imponiéndose a las defensas y algo más de movimiento en los marcadores. 

Duró poco, sin embargo, los catalanes seguían generando muchos problemas al juego interior de los locales, que echaban también de menos a Cuevas, pero aguantaba el tipo el conjunto de Ocampo gracias a los tiros libres (51-47, minuto 24). Pero con eso no bastaba. Tampoco funcionaban las rotaciones y los visitantes volvían a igualar el partido mediado el cuarto (51-51).

Trató Burgos de cerrar bien la zona, pero los catalanes encontraron vía libre en el tiro exterior y con dos triples consecutivos se colocaban a 4 puntos, obligando al técnico local a pedir un tiempo muerto (55-59, minuto 27). Conseguían los locales un respiro secando el ataque visitante y anotando dos tiros libres, pero poca cosa más, con lo que al cuarto decisivo se llegaba con 57-61 en el marcador.

Decisivo último cuarto

Comenzaba el último cuarto con otro triple y una canasta de un ICG Força Lleida que obligaba a los de Ocampo a un esfuerzo titánico para recortar los 9 puntos de desventaja. Lo conseguían los locales, que igualaban a 66 a 6´30 para el final. 

Pero el partido volvía a atascarse y eran los visitantes quienes conseguían desatascarlo en la recta final, con un nuevo triple y dos tiros libres que ponían contra las cuerdas a los locales, a cinco puntos y con sólo 21 segundos por delante (70-75). Pocas opciones tuvieron ya los de Ocampo ante un rival que tiró de oficio para acabar llevándose la victoria.