Fútbol
El Mirandés rescata un punto en el tiempo de descuento
Meritorio empate sobre la bocina ante el potente Levante UD gracias al gol de Carlos Martín (1-1)
El CD Mirandés salvó uno de los partidos más complicados que le quedan esta temporada consiguiendo un meritorio empate sobre la bocina ante el potente Levante UD. El partido estuvo siempre muy ajustado y fue poco vistoso, pues los visitantes tuvieron siempre mayor control y además se adelantaron en el tramo final del primer periodo para jugar de manera muy práctica en una segunda mitad donde a los locales les costó mucho generar, pero en el tramo final los rojillos se fueron arriba sin mirar atrás y en el tiempo de descuento tuvieron el premio del empate.
El Levante comenzó el partido mordiendo ante un Mirandés dormido en cuanto a ritmo e intensidad que pudo pagarlo bien caro muy rápido, pues en el minuto dos de juego los granotas tienen la primera clara tras un centro de Pablo Martínez donde Ramón Juan despejó muy blando de puños, su defensa le imitó y Bouldini marcó; pero el colegiado anuló el tanto por ajustado fuera de juego en el inicio de la jugada.
Un susto tremendo para los burgaleses, que no se dieron del todo aludidos porque dos más tarde tras otro buen centro de Pablo Martínez se vio un disparo de Oriol Rey que no acabó en la red de milagro.
En apenas cinco minutos los rojillos ya le habían visto dos veces las orejas al lobo y eso pareció suficiente, porque los de Alessio Lisci reaccionaron y no tardaron en equilibrar la contienda y jugar más alejados de su área. Así, en un abrir y cerrar los ojos los rojillos enfriaron el ímpetu de su oponente y llegados al primer cuarto de hora el choque ya hacía minutos que parecía muy igualado y, sobre todo, el ritmo endiablado del comienzo había desaparecido.
Ahora el duelo era otro bien distinto al del inicio, bastante más ajustado y con mucho balón dividido, sin nadie que impusiera su fútbol ni control alguno y con la precaución marcando gran parte de la posesión de unos y otros.
Eso sí, el Levante tenía algo más de pelota y daba la sensación de tener mucha más pegada, porque sin llegar a generar ninguna clara Dani Gómez o Álex Valle lo intentaron en la primera oportunidad que tuvieron y aunque la cosa quedó en nada no dejaron de ser dos buenos avisos de la escuadra dirigida por Javier Calleja.
Superada la media hora de juego el partido cada vez estaba más plano y ninguno de los dos conseguía pisar área con garantías mínimas de hacer gol, pero en esos momentos de juego igualado y hasta aburrido se verían dos destellos de calidad que cambiarían el devenir del encuentro y no precisamente a favor de los locales.
El primero en el 39´ cuando el talentoso Gabri Martínez recibe en el vértice del área y tras recortar hacia adentro saca un gran golpeo con la derecha que no tuvo premio ni fortuna porque el cuero se estrella en la madera defendida por Andrés Fernández.
El Mirandés no aprovechaba la mejor de todo el choque hasta ese momento y poco más tarde lo pagaba muy caro, porque el visitante Carlos Álvarez recibe en la frontal y sin pensárselo dos veces saca un disparo imparable a la escuadra para marcar un golazo y adelantar al Levante antes del paso por los vestuarios.
La segunda se reinició con otro aviso visitante con Carlos Álvarez y Bouldini como protagonistas ante un Mirandés bastante romo en lo ofensivo, que echaba de menos la baja de Martón y que tampoco tenía la suficiente pelota como para poder jugar en campo contrario e inquietar al portero foráneo, aunque Jonathan Gómez e Ilyas Chaira lo intentaron de forma tímida en esta fase de la segunda mitad. En todo caso, demasiado poco bagaje para hacer daño a un equipo del potencial del Levante, que además jugaba cada vez más cómodo y confiado.
Cumplida la hora de juego el panorama no resultaba nada alentador para los rojillos y casi que lo mejor era el resultado, que seguía vivo, porque con lo que respecta al juego el Levante tocaba y tocaba sin casi oposición acumulando posesiones larguísimas que le comían jugosos minutos al cronómetros sin que nada relevante sucediera.
El Mirandés sufría para robar la pelota y por contra a él apenas le duraba, por lo que no creaba peligro. De hecho, la siguiente reseñable también tuvo como protagonista al goleador Carlos Álvarez.
Sin apenas fútbol el Mirandés sería competitivo y a falta de un cuarto de hora recurrió al empuje y la garra para acercarse al marco rival, algo que logró hasta tener al poco una muy clara cuando sorprendió a su rival con un córner en corto donde Jonathan Gómez con todo a su favor no es capaz de conseguir el empate.
No desesperó el equipo de Lisci y a base de agresividad en los robos y acciones a pelota parada buscó su suerte de manera valiente, ahora con Pablo Ramón.
Los finales serían los mejores minutos rojillos en lo ofensivo y tuvo un par bastante claras, pero el Levante mantenía la compostura y con un juego tan rácano como práctico pareció asegurar la victoria por la mínima.
No fue así, la fé rojilla se mantuvo y su buena actitud tuvo premio, porque en el 91´ Pablo Ramón pone un centro no muy bueno que sin embargo la zaga despeja fatal y el rechace lo caza un Carlos Martín que empata el resultado para alegría de todo Anduva.
SEGUNDA DIVISIÓN JORNADA 23
CD MIRANDÉS - LEVANTE UD, 1-1
Levante UD: Andrés Fernández; Capa, Dela, Vezo, Álex Valle (Buba Sangaré, 87´); Oriol Rey; Carlos Álvarez (Rober Ibáñez, 87´), Pablo Martínez (Lozano, 75´), Ángel Algobia; Dani Gómez (Cantero, 75´) y Bouldini (Brugué, 60´).
GOLES: 0-1 (42´): Carlos Álvarez. 1-1 (91´): Carlos Martín.
ÁRBITRO: Guzmán Mansilla (Andaluz) y en el VAR Ávalos Barrera (Catalán). Tarjetas amarillas a entrenador Alessio Lisci, Reina, Pablo Ramón; Bouldini, Dani Gómez y Andres Fernández.
CAMPO: Anduva.