El San Pablo Burgos se ahoga en la orilla ante Lleida
Los de Encinas sufren su séptima derrota en liga en la complicada cancha del bloque catalán (77-72)
No pudo ser. Unos minutos finales deficientes, con más factores añadidos como pueden ser algunas decisiones de los colegiados y la mala fortuna en las lesiones de puntales como Corbalán o Lapornik, acabaron por sellar la séptima derrota liguera de San Pablo. Los burgaleses se ven alcanzados en la tabla por ICG Lleida aunque el average es de los de Lolo Encinas. Un encuentro bravo, muy peleado, con dos bloques potentes, y donde al final pesó el factor cancha.
Arrancó el encuentro frenético, con Hasbrouck y Micah Speight anotando sendos triples antes del medio minuto. Cogía las primeras rentas el cuadro leridano, con un 7-3 gracias a un espectacular alleyhoop de Hasbrouck sobre Kuath. Lapornik comenzaba a carburar, primero con una suspensión a cinco mnetros y después asistiendo en el alleyhoop de respuesta a Fischer, 7-7.
El esloveno de Celje estaba onfire y un triple suyo daba la primera renta a San Pablo, 9-10, aunque la fase de recital de Speight en el ecuador, cinco puntazos seguidos del playmaker (9-15 tras un dos más uno) coincidía con la lesión de Lapornik, dañado en un tobillo. ICG Lleida aguantaba el tipo gracias a los triples de Hasbrouck y Lobo evitando la escapada burgalesa. De nuevo equilibrio y de hecvho la mejora local en el compás final obligaba al tiempo de Lolo Encinas cuando los catalanes recuperaban el mando en el marcador, dos arriba.
Aunque Rosa tiraba del carro visitante, Krutwig con una buena entrada y adicional empataba a 22, dejando para Lobo el papel estelar a la hora de sellar los diez minutos de arranque con un espectacular 25-22 para los ilerdenses.
Arrancaba el segundo acto con Ristic imponiendo sus centímetros, ganchito para adentro. Le sobraban ciertas prisas a Longevida San Pablo, mejor cuando se bajaban las pulsaciones del encuentro. Así, entre Corbalán y Jiménez volteaban el electrónico en una dinámica de mandos alternos, con Lobo como gran argumento local para revolucionar las acciones.
La anotación había bajado de manerra evidente, 29 iguales en el ecuador del periodo, hasta que Micah rompía la sequía con un triple desde Huesca, prácticamente.
Recetas diferentes con Lleida buscando el tiro exterior y San Pablo Burgos aprovechaba las buenas acciones y el entendimiento entre sus hombres altos, Ristic y Fischer, para seguir en la pomada y al mando poco después con Millán Jiménez acertando en la larga distancia. Protestaba Barris Nord una antideportiva a Varela, y Rogic ponía un +4 que obligaba al tiempo de Gerard Encuentra, míster local. Un ataquen leridano bien construido permitía a Brito poner el 41-42 a 24 segundos del final con un hermoso triple.
Muy malo el inicio de Longevida San Pablo Burgos tras el descanso, completamente desconectados los castellanos. Matulionis y Simeunovic en el primer minutos enchufaban sendas canastas de tres puntos que ponían un 47-42. Pérdidas, malos tiros y faltas como la tercera en ataque de Fischer -al banco- obligaban a un tiempo de Encinas cuando a 6:14 Lleida se iba de siete.
Al fin, tras cuatro minutos y medio sin anotar, Speight veía la luz con un triple y ahí se iluminaba el eléctrico base. De hecho, en un parpadeo se calzó dos aciertos más desde la línea para poner el 51-51, aunque Javi Vega volvía a distanciar a los locales de cuatro. Ristic estaba tremendo en el rebote y los once puntos de San Pablo en el cuarto eran de Don Micah, hasta que a minuto y medio Ristic también se apuntaba al triplazo y Burgos se adelantaba en las luces, 55-56. Atic, uno de los últimos en aterrizar en el proyecto castellano, se lucía en esa fase cerrando el tercer cuarto seis arriba, 55-61.
Apretó con furia Barris Nord y un 2+1 de Villar hacía subir la temperatura. Atic, con su baloncesto a cámara lenta pero eficiente al ciento por ciento, seguía haciendo daño en las pinturas y Millán Jiménez, con un precioso aro pasado, daba renta de cinco a los de Lolo. El decorado parecía idóneo, con acciones como el rebotazo de puro coraje para Kasibabu, pero los árbitros metieron cuchara en decisiones como una canasta anulada a Ristic cuando se cantaba el 2+1 por una falta anterior más que dusosa. Un ataque pitado a Kasibabu acababa de enervar al banco burgalés, así como la cuarta de Barrera.
A cinco minutos y medio del final, una de las acciones de la noche, de la temporada, un gorro de Kasibabu absolutamente estratosférico sobre Villar, un pincho de merluza XXL. Pero los locales espabilaron tras la jugada y empataron a 65. El encuentro comenzaba a jugarse en los tiros libres y un jugadón entre Speight y Fischer, mate y adicional, ubicaba el 67-70. El propio Fischer alimientaba ilusiones con un palmeo de crack, 69-72, pero despertaba la veteranísima bestia Hasbrouck con un triple para empatar. Los locales jugaron mejor esta fase final, los nervios pesaron en San Pablo y una falta en ataque más que dudosa a Millán acababa de enterrar las opciones. Desde el 4,60, los catalanes sellaron su triunfo y salió cruz al final.
ICG FORÇA LLEIDA - LONGEVIDA SAN PABLO BURGOS, 77-72
ICG Força Lleida: Hasbrouck (20), Nacho Varela (2), Brito (3), Javi Vega (5), Kuath (9) -cinco inicial- Matulionis (5), Villar (8), Lobo (9), Krutwig (5), Simeunovic (11).
Longevida San Pablo Burgos: Speight (22), Vene (0), Barrera (0), Lapornik (5), Fischer (11) -cinco inicial- Corbalán (4), Atic (4), Kasibabu (5), Ristic (5), Rosa (6), Millán Jiménez (5), Rogic (5).
PARCIALES Primer Cuarto: 25-22
Segundo Cuarto: 16-20 (41-42).
Tercer Cuarto: 14-19 (55-61)
Cuarto Cuarto: 22-11 (77-72)
ÁRBITROS: Germán Morales, Daniel Checa y Eduard Colomer.
Eliminados: No hubo
PABELLÓN: Barris Nord.