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Victoria solvente del UBU San Pablo Burgos en su estreno liguero

El equipo de Roi Sánchez ofreció una gran imagen en su estreno y pese a que todavía está en pleno rodaje fue superior a su oponente de principio a final

Javier Domingo se dispone a lanzar a portería.SANTI OTERO

Burgos

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Buen debut liguero de un UBU San Pablo Burgos que derrotó en El Plantío y con bastante comodidad al siempre complicado Trasmapi UD Ibiza HC Eivissa, pues el equipo de Roi Sánchez ofreció una gran imagen en su estreno y pese a que todavía está en pleno rodaje sería superior a su oponente prácticamente desde el principio hasta el final.

Sin grandes alardes ni comodidad pero con las ideas muy claras, los burgaleses fueron imponiendo su juego y ya al tiempo de descanso las sensaciones eran muy buenas (13-9), mientras que en la segunda no rebajó sus prestaciones y sentenció el triunfo con bastante rapidez y mucho antes de la conclusión.

De salida ambos buscaron imponer un ritmo alto a la búsqueda de veloces transiciones con las que atacar la portería rival, algo que a los pitiusos les costó tres intentonas mientras que a los burgaleses dos. 

El gol de Chan desde los siete metros permitió a los de Roi Sánchez comandar el electrónico en esta fase inicial de partido donde no tardaría en verse la primera alternancia pues el nuevo fichaje ibicenco Chychykalo Roman, un lateral izquierdo de enorme calidad, hacía el segundo en su cuenta y colocaba el 2-3 en el minuto cinco.

El choque cogía vuelo y en el siguiente tramo se vieron las primeras exclusiones, también a un Elcio Carvalho que detuvo un siete metros a Fabio Lopes y tres intervenciones más de mucho mérito, pero así mismo no pocas pérdidas rojinegras y no pocos goles cómodos de un Ibiza que seguiría llevando la iniciativa en el electrónico durante un buen rato (5-6 en el 13´). 

Hasta que una nuevo exclusión al foráneo Malid y de seguido una cartulina roja a un Fabio Lopes que en seis metros se llevó por delante a Adrián Sánchez y a uno de los árbitros, permitieron que el San Pablo atacara con mayor soltura firmando un parcial de 3-0 que le daba la vuelta a la tortilla y no sólo en cuanto a números, también en cuanto a sensaciones (9-7 superado el cuarto de hora).

De nada sirvió que el técnico de los isleños Eugenio Tilves parara el partido con un tiempo muerto, porque los suyos habían perdido el orden defensivo ante un Burgos que por primera vez podía correr y marcar a la contra, pero también la inspiración defensiva ante una seis cero local que había ganado mucho en fortaleza. 

El arreón burgalés prosiguió constante hasta la llegada del tiempo de descanso y pese a que en ataque todavía no existía una gran fluidez ni un acierto sobresaliente, la renta se fue abriendo al mismo ritmo hasta marcar una nueva máxima de la matinal del domingo con un esperanzador 13-9 gracias a un prostero gol de estrategia culminado por Javi Rodríguez pero que tenía la firma de un Roi Sánchez que agotó uno de sus TM a escasos segundos del receso.

En el reinicio las lógicas imprecisiones de estas fechas y la falta de puntería de un cuadro local todavía en rodaje, dieron aire a un Eivissa que también tenía no pocos problemas pero que se mantenía en la pelea por el resultado con un Chychykalo robando y marcando a la contra (14-12 en el 3´). 

Pegó otro arreón el San Pablo, a la búsqueda de sentenciar la contienda rápido tras un par de exclusiones repartidas, y entonces volvió a coger una renta de +4 que dejaba a su oponente contra las cuerdas porque aunque todavía quedaba una eternidad para el final la facilidad con la que lo había logrado resultaba premonitoria. 

Así, antes de llegar al minuto diez Fabrizio Casanova destapó el tarro de las esencias con una rosca infernal que puso en pie a una grada feliz de ver el mejor gol hasta el momento, siguió un Chan infalible desde los siete metros y Espinosa puso la guinda y la nueva máxima con el 20-13.

La cosa amenazaba con goleada para un Eivissa muy corto de plantilla y todavía sin cerrar, pero los de Eugenio Tilves no se rindieron y respondieron con un parcial 0-3 que no cambiaba mucho las cosas pero sí reflejaba su intachable aptitud y no poca inteligencia competitiva, pues hacía ya muchos minutos que los visitantes habían rebajado mucho la velocidad del juego viendo que sólo tendrían sus opciones si el ritmo era relajado (21-16 al cuarto de hora y TM del entrenador visitante Eugenio Tilves).

Pero ya estaba todo el pescado vendido y de ahí al pitido final los burgaleses jugarían todo el rato con una renta en torno a los cinco goles que nunca varió. A la conclusión 31-25.