El Tizona se marca como objetivo llegar al playoff

«Sin presión», pero sin titubeos. El objetivo de temporada para el Grupo Ureta Tizona Burgos es clasificarse para disputar el playoff al término de la fase regular. En la práctica, el listón se queda un peldaño por debajo del rendimiento del equipo en la temporada pasada en la que llegó a disputar la final a cuatro por la segunda plaza de ascenso, pero el presidente del club, Miguel Ángel Benavente, no descarta llegar «hasta donde podamos», siempre que se pueda contar con «el ánimo de los jugadores y la suerte que siempre hay que tener acompañando en el deporte».

El presidente avisa que este año « la competición está más dura que la temporada pasada», pero recuerda que el paso de las jornadas coloca a cada equipo en su sitio y ya habrá momento de ver «si los que salían de favoritos y se siguen manteniendo de favoritos», si alguno da la sorpresa y se aúpa arriba de la clasificación y «otros que pensaban que iban a estar ahí como cabezas de serie, pues igual se quedan ahí a mitad de tabla con nosotros». Con todo, insistió en que su desero «de entrada» será «cumplir el objetivo de jugar el play-off».

El Tizona afronta la temporada con importantes novedades y no es la menor de ellas el cambio al frente del banquillo con la llegada de Salva Camps, en quien el presidente del conjunto azulón puso su confianza y reiteró que es el candidato que mejor se adapta al juego que es santo y seña de los de El Plantío. En ese sentido, Benavente anticipa que «el baloncesto que se va a realizar es muy similar al que se realizó el año pasado». Será «muy alegre y muy anotador» con «defensas férreas» y con el sello personal de Salva Camps.

Junto a ese objetivo deportivo el directivo del conjunto azulón marca un segundo reto mirando a su masa social, que les ha acompañado durante esos 35 años, y aboga porque «el público se siga divirtiendo».

El inicio de la competición con la disputa de la Copa España, implantada este curso por la Federación de Baloncesto, no ha dejado satisfecho al Tizona que, a juicio de su presidente, considera que «el invento no ha salido demasiado positivo». 

Benavente argumenta que, dado que en una competición donde participan 40 equipos en ocho grupos de cinco y «se clasifica solo el primero», el planteamiento «lógico» hubiera sido que «el partido más importante se jugase el último», ya que «es donde realmente igual te juegas esa posición uno».

Por eso critica que el primer partido fuera aquel en el que se enfrentaban «los dos de categoría superior con poco más de una semana de entrenamiento» porque, en su opinión, de esa forma la «competición que ya de por sí se queda desvaluada».

La Copa España «ha podido romper el ritmo de preparación que siempre se tenía», según Benavente.

El Tizona, tras haber caído derrotado ante el San Pablo Burgos en el primer partido de la Copa España, estaría virtualmente eliminado de la competición salvo que los del Coliseum, que han ganado todos sus partidos, tropezasen en el único enfrentamiento que les queda, ante el Rioverde Clavijo el 22 de octubre.

No del Tizona al baile de horarios

Para esta temporada, el Tizona ha vuelto a insistir a la Federación para que se mantengan sus partidos en Burgos en la noche de los viernes, ya que para el club «históricamente el viernes ha sido el día del baloncesto y el año pasado al final no sé si jugamos media docena de partidos» en esa jornada. 

Benavente recordó las dificultades del curso pasado para cuadrar los horarios en el polideportivo municipal, que, a diferencia del San Pablo que utiliza en exclusiva el Coliseum, obligan al conjunto azulón a compartir El Plantío con otros deportes como el balonmano, el baloncesto EBA y las competiciones escolares, generando problemas que en ocasiones han afectado al tiempo de práctica del equipo rival en la competición. 

Por ello, el club argumenta que los cambios de horarios de la temporada pasada para cuadrar las retransmisiones por televisión son un trastorno mayor de lo que aportan y por eso han solicitado que esta temporada se mantenga una mayor estabilidad en los horarios, una demanda que también comparten muchos otros equipos de la liga, desveló Benavente.

El presidente del Tizona realizó estas manifestaciones tras las renovación del acuerdo de patrocinio con la Fundación Caja Rural de Burgos, cuyo gerente, Germán Martínez, destacó como el baloncesto propaga «valores de trabajo en equipo, compromiso, esfuerzo y respeto», especialmente en el caso del Tizona. 

La Fundación Caja Rural de Burgos renueva su acuerdo con el CB Tizona en la firme creencia de que «las oportunidades económicas que el deporte de élite facilita a la sociedad burgalesa, tanto en Burgos provincia como capital, permiten un desarrollo sostenible».