El Mirandés fulmina al Castellón en diez minutos sensacionales

Diez minutos sensacionales del Mirandés, con tres dianas anotadas entre el 20 y el 30 del primer periodo, sellaron el justo triunfo del Mirandés en Castalia. Justo hasta ese 0-1 de Panichelli, los de Alessio Lisci habían soportado un tremendo asedio de los locales, pero con la primera diana del delantero rojillo, el cuadro albinegro se desmoronó como un castillo de naipes. En el segundo periodo el once de Anduva se limitó a contemporizar y a administrar esa cómoda renta, llegando hasta los 25 puntazos después de otra lección fuera de casa.

Con las ausencias de Lachuer y de Juan Gutiérrez, que rompía así su estadística de todos los minutos jugados en la zaga jabata, se plantó el Mirandés en el encuentro con un emotivo prólogo, bandera de la Comunitat en el césped y homenaje a las víctimas de la DANA incluidos. Y de salida, se tuvieron que refugiar los visitantes ante la avalancha atacante de los orelluts, con unos primeros minutos mordiendo en la presión y llegando en oleadas ante Raúl Fernández.

Suero y De Miguel avisaban antes del minuto cinco de encuentro y el Mirandés destacaba por tener posesiones de pelota rara vez superiores a los tres segundos. Al cuarto de hora, Unai Egiluz Tomeo salvaba en línea de gol el uno a cero cuando De Miguel controlaba en área chica y su pase atrás lo remataba Cala con aroma de 1-0. Espléndido el central de Durango.

La primera llegada mirandesista a los 19 minutos, cuando el zapatazo de Panichelli lo taponaba la zaga blanquinegra, empujando el ariete rojillo al meta Gonzalo cuando blocaba por alto. Enfado y conato de tangana.

Y al minuto, error del arquero local en la salida, pase que intercepta Panichelli en el área y define el argentino de Córdoba con un trallazo a las mallas. Mismos protagonistas en dos minutos y en dos acciones muy distintas, que dejaron groggy al Castellón. Un par de contragolpes del Mirandés pudieron ampliar la distancia, sin lograrlo.

Pero a la siguiente ya no hubo perdón en el contragolpe jabato. Y con el mismo protagonista. Reina asistió de cabeza y Joaquín Panichelli se iba en vertical, driblaba en la salida a Crettaz y definía a las mallas. Golazo y cero a dos, con el ariete del Mirandés total y absolutamente ´on fire´.

Y con fuego jugaba el Castellón en la salida de pelota y dejando un páramo de césped a la espalda de sus defensas. Así, antes de la media hora caía el tercero de un Mirandés que desarbolaba a los locales. Balón al espacio para Hugo Rincón, centro raso y Urko Izeta, tras controlar, machacaba a las redes el 0-3. Decorado soñado en los mejores diez minutos en cuanto a efectividad de los de Lisci en mucho tiempo.

Buscaba recortar el Castellón antes del asueto, pero con poquita fe -qué buena serie-. Raúl blocaba con seguridad un disparo de Suero desde el balcón del área con el crono marcando 37 minutos, pero Panichelli tuvo cerca el hat-trick en el primer tiempo cuando su zapatazo lo sacaba Gonzalo con manopla abajo en gran intervención. Y al borde del descanso, una fea entrada del local Calavera sobre Izeta sobre la línea de banda se revisó en el VAR más de tres minutos (!) hasta dictaminar la roja para el mediocampista local.

Tras la bronca en el descanso, el Mirandés jugaba cómodo en Castalia y Homenchenko tenía el cuarto en un disparo desde la frontal que se marchaba por muy poco. Los locales buscaban un milagro pero lo que rondaba era el 0-4 en la estrategia, con un remate poco ortodoxo de Parada que Willems despejaba sobre la misma línea.

Se estiraban los locales con más oxígeno tras dos relevos en el asueto, pero el Mirandés sabía administrar el crono y el marcador con sapiencia. Panichelli en un par de acciones de ataque volvía a meter el miedo en el cuerpo a la parroquia de La Plana, como en un cabezazo que se iba fuera por poco tras una acción ofensiva en el perfil izquierdo.

A un cuarto de hora del noventa se lucía Raúl Fernández en el mano a mano ante Moyita, desviando a saque de esquina lo que pudo ser el uno a tres de los albinegros. Arriesgaban los locales y el cuadro de Lisci, pese a contemporizar en exceso quizás, se acercaba de nuevo al cero a cuatro en un zapatazo de Lachuer desde la frontal que no pudo blocar Gonzalo.

A pesar de que la suerte del encuentro parecía ya echada, los locales no se rendían y un testarazo de Flakus Bosilj lo despejaba con apuros Raúl a córner. Joel Roca respondía para el Mirandés y firmaba una gran jugada personal a la contra al paso por el minuto 83, con intervención final del meta albinegro evitando mayores desgracias.

El propio Joel enviaba a dos palmos del poste cuando el crono ya se acercaba el noventa, y lo que llegaba era el tanto del honor del Castellón obra de Raúl Sánchez, empalmando muy bien en el área jabata y de volea un despeje bombeado de la zaga del Mirandés.

Incluso se lució el arquero Raúl al trallazo a bocajaarro de Flakus en el minuto 92, evitando que el Castellón se metiera en el encuentro con un dos a tres. Al final, justísimo triunfo y de nuevo trepando hacia la azotea de la tabla, en especial gracias al recital de dos hombres, un Panichelli letal arriba y un Gorrotxa que manejó la medular a su antojo. Vaya dos jugones.

CD CASTELLÓN - CD MIRANDÉS, 1-3

CD Castellón: Gonzalo; Chirino (Jozhua, 63´), Alberto (Salva Ruiz, 46´), Jetro Willems; Cala, Calavera, Van den Belt (Villahermosa, 80´), Israel Suero (Moyita, 46´); Mamah, De Miguel (Flakus Bosilij, 75´), Raúl Sánchez.

CD Mirandés: Raúl; Hugo Rincón, Egiluz, Pablo Tomeo, Parada (Tachi, 85´), Julio Alonso; Reina (Ander Martín, 71´), Homenchenko (Lachuer, 71´), Gorrotxategi; Izeta (Joel Roca, 54´), Panichelli.

GOLES: 0-1 (20´): Panichelli. 0-2 (24´): Panichelli. 0-3 (29´): Izeta. 1-3 (90´): Raúl Sánchez.

ÁRBITRO: José Luis Guzmán Mansilla (Colegio andaluz). Roja directa al local Josep Calavera (45+3´). Tarjetas amarillas a los locales Alberto (45+4´) y Chirino (46´) y al visitante Izeta (51´). El andaluz Milla Alvendiz, en el VAR.

CAMPO: SkyFi Castalia. Un total de 10.087 espectadores.