Fútbol
Lisci cuenta con un cambio de actitud del Mirandés en casa
El Mirandés se enfrenta en Anduva a un experimentado Cádiz en horas bajas, pero siempre peligroso
El CD Mirandés recibe este sábado (16:15h) en Anduva al Cádiz después de una semana en la que ha trabajado a fondo para mejorar sus puntos débiles tras la derrota sufrida frente al Tenerife y confiado, como es habitual, en contar con el respaldo de su afición para volver a sumar una victoria. El entrenador, Alessio Lisci, destacó ayer en la previa del partido la respuesta de sus jugadores que «han hecho una semana de entrenamiento muy, muy buena».
Se mostró convencido, además, de que este sábado ante el Cádiz, su «actitud va a ser ejemplar». Que «nadie dude que se van a dejar todo en el campo, y la afición va a estar orgullosa de ellos, sea cual sea el resultado», pronosticó.
Sin embargo, seguirá sin poder contar conTachi, Postigo y Alex pero recupera a otros jugadores que han superado las molestias a lo largo de la semana. En se sentido reconoció que pueden pesar las ausencias de los veteranos porque, en su opinión, «siempre tener algunos experimentados en el campo te suma», especialmente «ante rivales tan experimentados», aunque entiende que «en casa, el apoyo de la afición compensa la falta de personalidad en ciertas áreas».
Al analizar al rival, Lisci fue contundente en su evaluación: «Es un equipo que tiene recursos para hacer daño».
Aunque el Cádiz no atraviesa su mejor momento en términos de resultados, su calidad es incuestionable, especialmente en la ofensiva. Jugadores como Bryan y Ontiveros, que se destacan por su capacidad de desborde, y delanteros como Roger, quien recientemente ha vuelto a la plantilla, representan una amenaza importante a juicio de Lisci, quien también elogió la labor de Paco López, técnico del Cádiz, a quien ve «uno de los mejores entrenadores» de la categoría.
Lisci advirtió que su equipo deberá rozar la perfección en el juego para superar a un rival de este nivel. «Cuando enfrentas a jugadores así, debes hacerlo todo muy bien... va a ser un partido extremadamente difícil», señaló.
El entrenador italiano también destacó la influencia que el público de Anduva puede tener en el rendimiento del equipo, especialmente cuando se enfrentan a rivales con mayor experiencia. En el último partido, la asistencia bajó debido a las condiciones meteorológicas, pero Lisci confía en que los seguidores del Mirandés llenarán las gradas este sábado. «Este año están muy ilusionados porque el equipo va bien, y en casa estamos haciendo muchos puntos», comentó y resaltó que la plantilla hace su parte el mayor número de aficionados rojillos posible en las gradas «y ellos siempre suman y aprietan mucho. Espero que mañana [por hoy] la afición sea importantísima y nos empuje a hacer un gran partido».