Persiste el misterio sobre la muerte de Prince

El sábado pasado, cuando organizó una fiesta en su mansión y estudio de Paisley Park, en la afueras de Minneápolis, Prince Rogers Nelson apareció solo unos minutos para presentar dos de sus últimas adquisiciones: un flamente piano Yamaha y una guitarra que le habían hecho especialmente para él en Europa. Tocó brevemente solo el piano y lanzó un mensaje a los allí presentes:"Esperad unos pocos días antes de gastar cualquier plegaria".Nadie o casi nadie podía imaginar entonces que ese mensaje, con el que pretendía alejar los rumores que corrían como la pólvora sobre su estado de salud, podría interpretarse literalmente. Pero menos de una semana después, el jueves 21 de abril, Prince moría a los 57 años en esa misma mansión. Y desde entonces no han cesado las plegarias, que no solo han cobrado forma de oraciones sino también de bailes, de fiestas improvisadas, de panegíricos, de reproducciones de todo tipo de grabaciones y de homenajes y tributos, desde un mensaje del presidente de EEUU, Barack Obama, hasta interpretaciones de sus canciones en musicales de Broadway; de muros de Facebook y otras redes sociales llenos de referencias a Prince hasta un mundo bañado literalmente en púrpura.AUTOPSIA

La causa de la muerte del cantante no se ha dado a conocer aúny aunque la autopsia del cadáver ha empezado a las nueve de la mañana del viernes (hora local) y ha acabó a la una de la tarde en una oficina forense de Ramsey (Minneápolis), la cuenta en Twitter abierta expresamente por las autoridades ha anunciado que "los resultados de las pruebas pueden llevar días o semanas".La rumorología, no obstante, no ha podido esperar. TMZ, la misma web que dio primero la noticia de su muerte el jueves y que hizo estallar los comentarios sobre su salud la víspera de la citada fiesta del 15 de abril, cuando informó de que el avión en que Prince regresaba de dar unos conciertos en Atlanta había hecho un aterrizaje no previsto en Moline (Illinois) para que el artista fuera tratado de emergencia en un hospital, ha asegurado este viernes que esa visita médica se debió a una sobredosis. En concreto, aseguran que fue de Percocet, nombre comercial en Estados Unidos de un fármaco que combina la oxicodona (un analgésico opioide) y el paracetamol. Es altamente adictivo y, supuestamente, Prince habría empezado a tomarlo para tratar unos dolores de cadera que le asaltaron tras someterse a una intervención en el 2010.Citando fuentes anónimas, TMZ asegura que el cantante había consumido una cantidad tan elevada del fármaco que tuvo que recibir una inyección resucitatoria en el aeropuerto de Moline antes incluso de ser trasladado en ambulancia al hospital. Poco después de dar la exclusiva de su muerte, la web también había publicado una foto de Prince en el aparcamiento de una farmacia local asegurando que el artista había ido cuatro veces en la última semana y poniendo en duda que fuera cierta la versión de los representantes de Prince, que repetidamente han hablado de una gripe como motivo de la cancelación de algunos conciertos y de emergencias como la visita hospitalaria del 14 de abril.DISCOS, BICICLETA Y CONCIERTOS

Mientras la web especializada en periodismo de rapiña (pero con hitos notables en su historia; TMZ dio, por ejemplo, la exclusiva de la muerte de Michael Jackson) hacía ese retrato de dolores y adicciones, otros se han dedicado a escrutar otras cosas que el artista hizo en los últimos días de su vida, en los que llegó a colgar en Twitter mensajes en los que se declaraba "transformado", "rejuvenecido", "inspirado" y "amado". El sábado 15, por ejemplo, antes de la fiesta en Paisley Park, visitó Electric Fetus, una tienda de discos local de Minneápolis, y, entre otras cosas, se llevó una grabación de Stevie Wonder. También en los últimos días se le había visto paseando en bicicleta por la ciudad y el martes estaba con miembros de su banda en una mesa en el Dakota Jazz Club, un espectador más entre el público del concierto de la cantante de jazz y soul Lizz Wright.Todo acabó en algún momento del día 21. A las 9.43 horas de la mañana, una persona no identificada marcó desde Paisley Park el 911, el número telefónico para contactar con la policía en Estados Unidos. "Tenemos a alguien inconsciente", dijo una voz masculina, según la transcripción de la llamada que ha hecho pública la oficina del sheriff del condado de Carver. Y añadió: "Um, estamos en casa de Prince". "¿Sabemos cómo ha muerto esa persona?", preguntó el operador. "No lo sé, no lo sé", fue la respuesta. A las 10.07 el personal médico que llegó a Paisley Park declaró la muerte de Prince Rogers Nelson. La explicación oficial de las causas tendrá que esperar.Una web especializada en primicias"Prince, muerto a los 57 años". Este es el titular con el que el digital estadounidense TMZ, especializado en 'celebrities' de Hollywood, daba este jueves la exclusiva mundial de la muerte del cantante. Desde su aparición en diciembre del 2005, fruto de la colaboración entre AOL y Telepictures Productions, ambas propiedad de Time Warner, TMZ se ha apuntado destacadas primicias. Junto a la de Prince, la más destacada fue la de la muerte de Michael Jackson, el 25 de junio del 2009. Medios considerados serios dudaron de la veracidad de la noticia y cuando la publicaron, la información de TMZ llevaba horas circulando por las redes. En los días siguientes también se hizo con las grabaciones de los servicios de emergencias que atendieron al rey del pop. También fue el primer medio en informar de la muerte de Paul Walker, el actor protagonista de la saga 'Fast & Furious', en accidente de coche, y de los fallecimientos de la actriz Brittany Murphy y de Sage Stallone, hijo de Sylvester Stallone. Asimismo ha destapado escándalos que implicaban a famosos, como los comentarios antisemitas de Mel Gibson cuando fue detenido por la policía por conducir bebido, las peleas matrimoniales de Tiger Woods, la agresión de Solange Knowles, hermana de Beyoncé, a Jay Z, o la paliza de Chris Brown a Rihanna. En el historial de TMZ también ha habido pifias, como la publicación de una supuesta foto de Steve Jobs enfermo de cáncer que resultó ser falsa.