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La UE ante el terror

El Estado Islámico trata de mostrar fortaleza mulitplicando sus atentados mientras retrocede en Siria e Irak

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Publicado por
ELISEO OLIVERAS
Burgos

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Los retrocesos territoriales que sufre el Estado Islámico (EI) en Siria e Irak impulsan al grupo a multiplicar sus atentados en la Unión Europea (UE) y el resto del mundo para poder presentar nuevos éxitos y seguir ampliando su apoyo popular internacional, según coinciden los expertos y confirma la secuela reciente de atentados.El portavoz del grupo, Abu Muhammad Al-Adnani, ya efectuó un llamamiento a sus seguidores en el 2014 para que mataran a"infieles europeos y norteamericanos" dónde y cómo pudieran. Estado Islámico se apoyó inicialmente en lobos solitarios para los atentados, pero los últimos ataques muestran la participación de combatientes yihadistas que han regresado deSiria y que preparan a reclutas locales para atacar "objetivos fáciles" con numerosas víctimas civiles, destaca la agencia policial paneuropea Europol.Han regresado 2.000 combatientes yihadistas

El número de combatientes yihadistas que han regresado a Europa se cifra en 2.000, lo que muestra la gravedad de la amenaza, ya que las autoridades desconocen su paradero y solo unos pocos han sido detenidos. El órgano antiterrorista belga OCAM estima que al menos 117Europol en un informe del 18 de enero señala que "el Estado Islámico ha desarrollado un comando de acción externa entrenado para ataques al estilo de las fuerzas especiales" y que tiene "capacidad para golpear a voluntad en cualquier momento y en casi cualquier objetivo elegido". El informe subraya las "las células terroristas que operan en Europa tienen una base nacional o local". Los expertos europeos, norteamericanos e israelís coinciden en que para combatir con eficacia el terrorismo islámico es esencial disponer de datos fiables de inteligencia sobre los sospechosos, compartirlos y "elaborar mapas humanos de las zonas donde se siembra y cultiva la semilla del extremismo". Pero los atentados de los últimos años han revelado graves fallos en los servicios de inteligencia y seguridad belgas y franceses.Dos ejemplos entre muchos: Los responsables de los atentados de París de enero del 2015, Cherif Kouachi, (Charlie Hebdo) yAmedy Coulibaly (supermercado judío) fueron definidos en un informe de la Fiscalía de París de julio del 2013 como los "acólitos" de Djamel Beghal, peligroso miembro de Al Qaeda y del Grupo Armado Islámico (GIA), a los que conoció en la cárcel y con los que siguió en estrecho contacto. Pero no eran objeto de vigilancia especial.Un anunció público

Abdehamid Abaaoud, cerebro del ataque a París de noviembre del 2015, era también el líder de la célula desmantelada en Verviers (Bélgica) en enero del 2015. Abaaoud, estrella mediática de Estado Islámico, anunció en la revista inglesa del grupo Dabiq de febrero que había vuelto a Bélgica y que tenía un piso franco y armamento para realizar atentados. Pero ese anuncio público no desató una caza humana, lo que posibilitó los ataques de París.El coordinador antiterrorista de la UE reprochó a los gobiernos europeos que siguen sin compartir información de los sospechosos de terrorismo sin aportar, ni compartir datos e información suficiente sobre los sospechosos de terrorismo. Por ejemplo, en la base de datos común solo hay información sobre 2.786 combatientes yihadistas (1.473 en la de Europol), mientras que su número real ronda los 5.000.Otros fallos en la lucha antiterrorista son el floreciente mercado negro de armas europeo y que las antiguas armas reconvertidas para fogueo se transforman con facilidad en armas letales de nuevo y no están incluidas en la legislación de la UE. Además, la directiva europea de armas de fuego está pensada para facilitar su venta en lugar de proteger al ciudadano, como revela una investigación de la revista alemana 'Der Spiegel'.La cobertura ideológica

Los dirigentes siguen subestimado el papel clave de la expansión del extremismo salafista y wahabí en la cobertura ideológica y justificación de los atentados yihadistas y no actúan por miedo a ser calificados de islamófobos, lamenta el sociólogo francés Gilles Kepel. El papel del salafismo en la radicalización de la población de Molenbeek (Bruselas) ya fue denunciado en el 2006 por Hind Fraihi en su libro Clandestina en el Pequeño Marruecos, pero fue desdeñada y acusada por las autoridades de fomentar el racismo.

La política de austeridad y la destrucción de empleo por la crisis  fomentan una degradación y empobrecimiento adicional de las comunidades musulmanas marginalizadas en Europa, lo que facilita la labor de los predicadores extremistas financiados por Arabia Saudí y Catar, con su rechazo de la democracia y los valores europeos, calificados de incompatibles con el Islam.Los ministros de Interior europeos prometieron el jueves compartir información sobre los sospechosos de terrorismo, como hacen después de cada atentado, pero que siguen sin cumplirlo. La Comisión Europea y los gobiernos plantean ahora como la gran solución crear un registro con los datos personales de los pasajeros aéreos en la UE, pero olvidan que los terroristas vivían en Bruselas y París y se desplazaban por Europa en coche.