CITA ELECTORAL
El independentismo corso echa el freno
La coalición de autonomistas e independentistas pretende reeditar su histórica victoria del 2015 en las elecciones regionales de este domingo
El nacionalismo corso muestra músculo, pero pone sordina a la vía de la independencia. En Arinella, a las afueras de Bastia, bajo una carpa blanca y al ritmo pegadizo de la música local, los candidatos de Pè a Corsica (Por Córcega), la coalición de autonomistas e independentistas favorita para revalidar la victoria en los comicios regionales de este domingo, quemaron sus últimos cartuchos en el cierre de campaña ante más de mil simpatizantes.La sombra del procés planeó sobre esta isla mediterránea de 330.000 habitantes cuando la crisis catalana alcanzó su apogeo tras el referéndum del 1 de octubre y la proclamación unilateral de independencia del Parlament, pero este jueves la palabra Cataluña no se mencionó en el mitin.El peligro de un conflicto como el catalán en Córcega ha sido el principal ángulo de ataque de los partidos de la oposición, aunque, en opinión del profesor de la Universidad de Córcega, André Fazi, no está claro que sea suficiente para reconquistar a su electorado. "La situación corsa está objetivamente muy lejos de la catalana", subraya.La isla celebra este domingo la primera vuelta de unas elecciones trascendentales. De ellas saldrá el equipo de Gobierno del nuevo órgano territorial, una entidad única y con más poder que nacerá el 1 de enero del 2018 fruto de la fusión de los dos departamentos actuales, Córcega del Sur y Alta Córcega.Lista única nacionalista
El autonomista Gilles Simeoni, actual presidente del Consejo ejecutivo, y el independentista Jean-Guy Talamoni, a la cabeza de la Asamblea regional vuelven a presentarse juntos en una lista única.Después de conquistar la alcaldía de Bastia en el 2014, vencer en las territoriales del 2015 con casi un 36% de votos y lograr tres de cuatro escaños en la Asamblea Nacional durante las legislativas del 2017, el tándem nacionalista confía en mejorar sus propias marcas.Su objetivo es superar el resultado de hace dos años y obligar a París a escuchar sus reivindicaciones, básicamente negociar un estatuto de autonomía con poder legislativo, y reconocer la cooficialidad de la lengua corsa. Para ello es necesario reformar la Constitución francesa.La independencia no está, por lo tanto, en el orden del día y ni siquiera Talamoni se lo plantea mientras Córcega no despegue económicamente. Hoy sólo representa el 0,4% del PIB francés, de ahí que se mire a Cataluña más como un referente económico que como un modelo político.Cataluña, una referencia reciente
"Cuando los nacionalistas llegaron al poder en 2015, empezaron a mirar hacia Cataluña. Unos porque pedían la independencia y otros por su modelo económico. Pero es una referencia reciente, porque para Simeoni el modelo es el italiano del Valle de Aosta y para Talamoni era el País Vasco", explica a este diario el historiador Antoine Marie Graziani.El declive de los partidos dominantes, un deseo de renovación política y el fin de la violencia, tras el abandono de las armas del Frente Nacional de Liberación Corso (FNLC) en 2014, ha llevado a las instituciones, tras cuarenta años en la oposición, a una generación de nacionalistas cuya identidad se ha forjado en la lucha y la oposición al Estado francés.Frente republicano
Aunque confían en el triunfo, los candidatos de Pè a Corsica temen que la posible unión de la derecha y la izquierda en una suerte de frente republicano intente cortarles el paso en la segunda vuelta que se celebrará el próximo 10 de diciembre. A las dos candidaturas de la derecha que han anunciado su alianza podría sumarse La República en Marcha, el partido de Macron.Jean-Guy Talamoni denunció que el único punto en común de candidatos ideológicamente dispares era "recuperar sus sillones" y alertó a sus tropas: "Todavía no hemos ganado. La primera vuelta será decisiva"El tablero político se completa con la Francia Insumisa -que concurre junto a los comunistas en contra del criterio de Jean Luc Mélenchon-, el Frente Nacional, y los independentistas radicales de Rinnovu, que han rechazado unirse a la coalición nacionalista gobernante. Partido Socialista y Ecologistas no se presentan.La falta de estudios impide saber si el sentimiento nacionalista avanza en Córcega pero lo que, a juicio del investigador André Fazi, está claro es que la popularidad de Simeoni le ha permitido conquistar a electores que antes votaban a la izquierda o a la derecha.Cuando Simeoni se coloca frente al atril para clausurar el mitin de Bastia, sonríe, bromea -en corso y en francés- y el auditorio ríe. Tras la huella visible del cansancio se adivina el carisma. Les habla de una aventura humana, de emoción, de paz, de diálogo, de confianza en el futuro. "No nos dirigimos sólo a los nacionalistas. No queremos una Córcega dividida en dos bloques. Este país lo vamos a construir juntos, incluso con quienes nos han cerrado la puerta", subraya.ç
CLAVES
Nueva administración territorial
El 1 de enero del 2018, Córcega fusiona en un único ente territorial sus dos departamentos actuales. La coalición nacionalista que gobierna en la isla desde diciembre del 2015 espera revalidar su victoria en las elecciones regionales.Nueva Asamblea
Unos 234.000 electores podrán votar este domingo para elegir a los 63 miembros de la futura Asamblea corsa. El escrutinio es mayoritario a dos vueltas. Las candidaturas que superen el 7% pasarán directamente a la segunda y las que logren entre el 5% y el 7% tendrán que buscar alianzas.Nuevo Ejecutivo
La Asamblea elegirá al Consejo ejecutivo, el Gobierno local, que debe salir adelante con una mayoría absoluta. Los consejeros votarán luego una lista de once personas y quien la encabece será nombrado presidente. La nueva administración territorial tendrá a su cargo 5.400 funcionarios.