El Correo de Burgos

LA CABAÑA (MEDINA DE POMAR, BURGOS)

Chuletón con nombre y apellidos

El Asador, más conocido como El Templo del Chuletón, es un referente de la gastronomía en Las Merindades por sus especialidades de carnes a la brasa y pescados y mariscos a la plancha  

Urbano Arciniega posa con un cochinillo cocinado en horno de piedra. L. C.

Urbano Arciniega posa con un cochinillo cocinado en horno de piedra. L. C.

Publicado por
DAVINIA ANDRÉS / BURGOS
Burgos

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Las Merindades tiene tantos atractivos que para el visitante es complicado decidir con cuál quedarse. Sus espectaculares paisajes, sus pintorescos pueblos, su huella histórica, sus mitos y leyendas… Si a esto, que no es poco, le sumamos una gastronomía de calidad que hace las delicias de los amantes del buen comer, la visita se hace imprescindible. 

Para quien se quede con ganas de más o prosiga su viaje a Burgos, aquí podrá encontrar una selección de los mejores bares y restaurantes de la capital burgalesa votados en TripAdvisor por sus clientes. 

Un clásico en Medina

Uno de esos bastiones de la buena cocina en la norteña comarca burgalesa de Las Merindades es el Restaurante Asador La Cabaña, en Medina de Pomar, o como es conocido por los lugareños, el Templo del Chuletón que, por otro lado, nunca un sobrenombre ha dado tanto en el clavo. Su especialidad, las carnes y pescados a la brasa que su dueño, Urbano Arciniega, elabora cuidando el más mínimo detalle.

Para Urbano el secreto de su famoso chuletón es precisamente que no hay secreto, una buena carne y saber el punto exacto para retirarlo del fuego, algo que, aunque parezca obvio, no es nada fácil de conseguir. Gracias a este buen hacer, aquellos que pasan por este templo de la gastronomía, repiten y recomiendan, algo que sin duda no es baladí. 

La historia del Asador La Cabaña comienza hace 17 años cuando Urbano decide poner en marcha varios establecimientos de ocio nocturno y un restaurante en la localidad medinesa. Pasado un tiempo decide que la mejor opción es dar un giro a su negocio para centrarse en la restauración y a partir de ahí ofrecer una cocina de calidad. Así vieron que pocos establecimientos de la zona tenían en sus cartas un buen chuletón a la parrilla y por ese afán de ofrecer algo diferente que no dejase indiferente, surgió El Templo del Chuletón.

La filosofía de trabajo es mejorar día a día, como explica Urbano. «Es una lucha diaria y continua. Hay que intentar superarse todos los días y dar al cliente un producto de calidad con un buen servicio». 

Ese afán por innovar y buscar nuevos platos que incluir a su oferta se hace todavía más imprescindible en tiempos complicados como los que vive en este momento la hostelería, con la incertidumbre generada por la pandemia. Como destaca el responsable del restaurante La Cabaña, ellos siguen al pie del cañón «tirando con todas las fuerzas» y, aunque el negocio ha bajado, cree que, si el trabajo sigue viniendo como hasta ahora, su plantilla de tres empleados se podrá mantener. Eso sí, «si algún día tengo que bajar la calidad, cierro», afirma rotundo Urbano Arciniega.

La comida del Restaurante Asador La Cabaña se define como mediterránea. Con una carta basada en la cocina tradicional y sus menús elaborados con el mimo que se hace en casa. Todo ello con productos de proximidad que el propio Urbano cultiva en su huerta. los pescados llegan directamente de la lonja de Bilbao, así como el marisco madurado en el propio vivero del restaurante, y sus carnes son de productores de confianza que garantizan la excelencia de la materia prima.

Pero La Cabaña es mucho más que su famoso chuletón. Sus asados son excelentes y están especializados en cordero y cochinillo al horno de leña. De hecho, consiguieron el 5º Premio Nacional en Madrid Fusión al mejor restaurante en la categoría de ‘Asadores Castellanos’. Como señala Urbano Arciniega lo esencial, como en todo, es tener una materia prima de calidad y en las mejores condiciones. «Nosotros tenemos una política, que es que el cliente espera al producto, pero no el producto al cliente. Por eso tanto el cochinillo como el cordero son de encargo».

Aunque el chuletón es su buque insignia y sus asados cuentan con el reconocimiento de los propios profesionales del sector de la restauración en el ámbito nacional, su carta va mucho más allá y cualquiera puede encontrar la opción más adecuada para disfrutar de una buena comida. «Estamos abiertos a todos los gustos y todos los bolsillos. Tenemos una oferta muy extensa y normalmente contamos con el 85% de los platos de la carta».

El restaurante La Cabaña cuenta con dos amplios comedores que cumplen con todas las garantías que exigen las autoridades sanitarias, además de con una amplia terraza en la que los más pequeños, y los mayores también, pueden disfrutar de una muestra de aves que anidan allí.

Aunque el futuro se abre incierto, Urbano es optimista gracias a la respuesta de sus clientes. «La gente nos ha respondido y eso te sube la moral y más ahora. Al comienzo de la pandemia tuve que llevar a mis empleados al ERTE y en julio los saqué a todos al 100%. Eso es una buena señal. Vamos a pedir que esto no vaya a peor».

Dirección Paseo de la Estación s/n. Medina de Pomar. Burgos. Tfno. 947 191 774 / 607145026

CAPACIDAD: 110 comensales en dos comedores. 

CIERRE Y HORARIOS: De martes a viernes de 10.30h. a 17h. y de 20.30h. a 22h cenas bajo reservas. Fines de semana horario continuo de 10.30h. a 22h. Lunes descanso semanal.

COCINA: Mediterránea tradicional. Especialidad en carnes y pescados a la brasa y asados.

PRECIO MEDIO: 30 euros a la carta. Menú del día 8,90 euros (de lunes a viernes)

RESPONSABLE DE COCINA: Urbano Arciniega

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