La Plataforma láctea cumple un año

Esta semana se cumplirá un año de la puesta en marcha en Castilla y León de la Plataforma de Competitividad del vacuno de leche que nació con un objetivo prioritario: dar estabilidad y sostenibilidad al sector. Una estrategia integral a medio y largo plazo creada ‘a rebufo’ del Acuerdo Lácteo firmado en Madrid, en septiembre de 2015. Un acuerdo que, a día de hoy, no ha tenido un efecto directo en los ganaderos que, como denuncian las organizaciones agrarias, siguen trabajando «por debajo de costes».Hay poca estabilidad en los contratos, los precios apenas suben ligeramente frente al repunte internacional, y los profesionales compensan la caída de ingresos gracias a los bajos precios de los forrajes. Tan solo se ha detectado un incremento de precios de la leche spot, por encima incluso de la contratada.A pesar de ello, el director general de Producción Agropecuaria de la Junta, Jorge Llorente, subraya el cambio de tendencia en el vacuno de leche. «Ya no hay descenso de precios y se observa una ligera recuperación». El responsable de Agricultura reconoce que el sector ha atravesado una época «traúmatica» con una crisis de precios y de contratación de volumen, y que ahora hay que seguir trabajando en «contratos de larga duración y un precio neutro». Esta es la apuesta de la Consejería plasmada en las 31 medidas incluidas en la Plataforma, y que se implementarán en esta legislatura.Entre ellas se encuentra el ‘instrumento de estabilización de rentas de las explotaciones’ previsto inicialmente para 2017. Una medida, dentro del PDR, para indemnizar a los ganaderos de vacuno de leche por «una severa caída en sus ingresos». Aunque la Consejería sigue trabajando en su puesta en funcionamiento, la realidad es que, como explican desde la dirección de Producción Agropecuaria, se están encontrando varios problemas. Primero hubo que convencer a Europa con un cambio en el diseño original y abrir este instrumento a otros sectores, además del lácteo. Y ahora, como explica Jorge Llorente, el «obstáculo» es la normativa respecto a los fondos mutuales, que es lo que realmente es este mal denominado ‘seguro de rentas’. Y es que no es sencillo, afirma, encontrar entidades que cubran los riesgos y respalden esta iniciativa. «Pondremos el empeño para que salga, pero es complicado en este momento», según reconocen.Desde las organizaciones se muestra una total «desconfianza» respecto a la puesta en marcha de este instrumento. Incluso, desde la UCCL, su coordinador regional, Jesús Manuel González Palacín, cree que «como filosofía está bien», aunque advierte de la imposibilidad «técnica y táctica» de ponerlo en práctica. Y es que el ganadero debe poner dinero para cubrir ese fondo mutual, algo complejo en tiempos de crisis. La Junta incluso va más lejos y plantean una reflexión. En opinión de Llorente, «el hecho de que en Europa nadie se haya acogido a esta medida, quizás implique que el diseño no sea el adecuado».Mientras se resuelven o no estos «obstáculos», la Consejería sigue trabajando en la formación, los planes de eficiencia energética y el estudio de costes y márgenes de las explotaciones de vacuno de leche, para ayudar a los profesionales «a tomar decisiones adecuadas en la gestión»». Hay datos ya de tres trimestres de algunas de las granjas que participan en esta red regional (entre 25 y 50 explotaciones), y será con los valores de todo un año cuando se extraigan las primeras conclusiones, más allá del Rengrati. La Junta insiste en que hay que reducir costes ya que es «difícil» influir en los precios.La realidad es que al tiempo que estas medidas se implementan, el ganadero sigue sin percibir muchos cambios en su día a día. Para el coordinador regional de la Alianza UPA-COAG, Aurelio Pérez, el éxito o fracaso de la Plataforma se medirá en la capacidad de aglutinar la oferta, un compromiso adquirido por las cooperativas de Castilla y León. Pérez insiste en que «no hay apuesta por la comercialización ya que sigue predominando una concepción individualista».En este sentido, Urcacyl sigue trabajando en la constitución de una nueva OP. David Llorente, técnico de ganadería confirma que la Asociación Láctea Empresarial (ALE) ya está inscrita en el registro de asociaciones de la Junta y que la intención de las cooperativas es convocar una reunión a finales de noviembre o principios de diciembre. De momento hay siete cooperativas constituyentes, y esperan sumar otras seis más para llegar a las toneladas necesarias para crear la Organización de Productores Lácteos prevista.En cuanto a la situación del sector, Llorente pone de manifiesto que los productos industriales y el mercado de futuros está en alza «pero todavía no ha despegado del todo». Así explica que, aunque existen algunos contratos que han subido ligeramente, «todavía no se haya trasladado esa bonanza». A su juicio, habría que discernir «si las bajadas de precios en los mercados de futuros se trasladan más rápidamente que las subidas y si se trata de una recuperación consolidada o de rebote».Todo apunta a un punto de inflexión en la tendencia de precios. Los últimos datos del Fega correspondientes al mes de septiembre reflejan un ligerísimo repunte en el precio que sigue siendo el peor de los últimos cinco años, junto a la pérdida de activos, 76 en Castilla y León desde el mes de enero.ASAJA, la Alianza y la UCCL no son optimistas de cara al futuro. «Cuando se pague al ganadero entre 36 y 40 céntimos, hablaremos de reactivación», según Aurelio Pérez, que reclama, junto al resto de organizaciones, la creación de un observatorio de precios y la regulación de la figura del defensor de la cadena, dos medidas previstas para 2016 y que están aún pendientes.

Para el secretario de ASAJA, José Antonio Turrado, «no ha pasado nada relevante en el sector lácteo desde hace un año, ni por parte del Gobierno, ni desde la Junta». Es más, cree que la esperanza de que los precios mejoren será fruto de los mercados internacionales, no de las medidas de la UE o de la política nacional y autonómica. González Palacín, por su parte, aprovecha el nuevo Gobierno y pide a Isabel García Tejerina que convoque una mesa de concertación para que «nadie venda por debajo de los costes de producción».El sector trabaja en una serie de medidas que, por el momento, no se traducen en el productor. Desde la industria se insiste en que los acuerdos «sirven». Carlos Martín, de la Federación de Industrias Lácteas, asegura que se ha mejorado en transparencia y que los precios se están «estabilizando». A su juicio, «no se debe reducir el problema del sector lácteo solo a los precios». «El problema no se soluciona si se suben tres céntimos el precio de la leche», afirma. Martín aboga por un sector «profesional» y muestra su confianza en la ministra de Agricultura. Por su parte, desde la distribución, Isabel del Amo, presidenta de Asucyl, sigue confiando en una cadena de «valor compartido». En este sentido, asegura que el comportamiento de la distribución en Castilla y León ha sido «bueno» en este año. Del Amo confirma que hay «una apuesta clara por la leche española en los lineales.