PROSPECCIONES FALLIDAS
Los ecologistas celebran la renuncia de Repsol y piden evaluar los daños
Reclaman al Gobierno que declare en la zona un santuario de ballena
Las oenegés ecologistas han celebrado y manifestado su alegría por la decisión de Repsol de abandonar sus planes de extraer hidrocarburos junto a Canarias, después de que la empresa haya evaluado una mala calidad y baja cantidad de los recursos que aspiraba a obtener. Sin embargo, en declaraciones a Europa Press han reclamado que ahora se analicen los daños ambientales causados y al Gobierno que declare en la zona un santuario de ballenas.Así, el responsable del área de clima y energía de Amigos de la Tierra, Alejandro González, ha valorado la noticia como "muy positiva" por las afecciones que producían a los ecosistemas canarios ante el riesgo de vertidos y porque ha subrayado que todas las reservas de petróleo deben quedar bajo tierra para frenar el cambio climático.Además, ha apuntado que la imagen de Repsol en Canarias ahora está por los suelos y espera que una vez vuelva a Angola a seguir con las prospecciones "no encuentre nada" en el país africano. En todo caso, ha advertido de que la decisión no es definitiva y ha manifestado el deseo de la organización de que "la decisión sea irrevocable y no vuelvan nunca más".Por su parte, el coordinador estatal deEcologistas en Acción, Paco Segura, ha querido dejar "bien clara la alegría y satisfacción por esta magnífica noticia para el medio ambiente, para Canarias y para España en general".Sin embargo, ha dicho que esto no supondrá el fin de la lucha sean donde sean las prospecciones contra porque el petróleo es "perjudicial per se, en todos sus ciclos de producción y uso y crea problemas". En su opinión, en la decisión de la empresa petrolera ha sido "clave" la movilización y la contestación social porque "la empresa ha visto muy perjudicada su imagen".Para el director ejecutivo de Greenpeace, Mario Rodríguez, también se trata de "una buena noticia" que Repsol haya constatado que hay gas de mala calidad y no comercializable, pero ha añadido que desde Greenpeace exigen a la empresa y al Gobierno que realicen una evaluación de los daños causados por las prospecciones, especialmente porque "han impedido cualquier evaluación independiente incluso fuera de una zona de exclusión que en realidad no lo es".En este contexto, se ha lamentado de "hasta donde ha llegado este Gobierno" por favorecer los intereses privados que ha llegado a poner a la Armada al servicio de una compañía y en riesgo el futuro de Canarias."Repsol no puede irse por la puerta de atrás sin dar explicaciones y con arrogancia", ha aseverado Rodríguez, que advierte de que esto sería una "actitud intolerable" que evidenciaría la "impunidad de Repsol con el beneplácito de un Gobierno y, sobre todo de un ministro que han antepuesto los intereses de la empresa a los de la sociedad".
ACTIVISMO CON RESULTADOSAdemás, ha destacado que tanto Greenpeace como otras oenegés han contribuido a que Repsol reconsiderara su decisión. En este sentido, ha recordado la acción de protesta realizada junto al buque de posicionamiento dinámico Rowan Renaissance que se saldó con un choque entre sus lanchas y las de la Armada Española. Como resultado de la embestida, una joven activista cayó al agua y tuvo que ser operada de urgencia de sus heridas, y dos lanchas de la oenegés sufrieron también importantes daños."Nos ha pasado una factura grande, pero estamos contentos y orgullosos de haber contribuido a que Repsol se vaya. Lamentamos que el coste es cada vez más elevado en multas, daños y acciones desproporcionadas", ha valorado Rodríguez que cree que noticias como la de este viernes dan sentido al riesgo que asumen los activistas."Ojalá un día no tengan que exponer tanto su integridad física y su libertad para evitar estos desmanes. Por eso pedimos explicaciones y análisis de los impactos y al Gobierno que cambie la fiebre por el oro negro por la fiebre por el sol y el viento que son el futuro energético de este país", ha concluido.Por su parte, el director ejecutivo de WWF, Juan Carlos del Olmo cree también que la noticia es "extraordinaria" y que, con independencia de que haya más o menos recursos de hidrocarburos en la zona, lo importante es también como se ha movido la campaña social en Canarias que ha provocado que el yacimiento para Repsol fuera "menos rentable".
PROTECCIÓNAsimismo, tras celebrar la decisión, ha reclamado que ahora es el momento porque ya no hay excusa para proteger la zona. Por ello, ha anunciado que desde este momento WWF se centrará en exigir la declaración de esta zona como Lugar de Interés Comunitario (LIC) marino, la ampliación de la zona protegida y, a continuación, la creación de un santuario de ballenas en este lugar."El Ministerio (de Medio Ambiente) nunca debió dar esa autorización en esa zona que es la mejor de ballenas de Europa. Exigimos la creación de un santuario de cetáceos porque ya no hay razón estratégica ni de ningún tipo para evitar la declaración de la LIC", ha defendido.En este sentido, ha recordado que la oenegé ha recogido ya más de 40.000 firmas para reclamar un santuario de ballenas al Gobierno y para que la Unión Europea exija esta declaración. La zona, según ha recordado es la décima del Programa Life Indemares y la única que aún está sin declarar.Mientras, la delegada de SEO/BirdLife en Canarias, Cristina González, ha celebrado que con la decisión, las especies, la Red Natura 2000 y la sociedad canaria recuperan garantías de protección y bienestar. Por ello, califica la finalización de los sondeos como una "excelente noticia" para la biodiversidad canaria, dados los riesgos que suponía para las especies, los espacios protegidos y el modo de vida de los canarios."Las prospecciones petrolíferas y una posible explotación futura de dichos recursos amenazaban la salvaguarda de importantes valores naturales que alberga el archipiélago canario como es el caso de algunas de las colonias de aves marinas más importantes de España", ha apostillado González.En este contexto, ha recordado que Canarias están en un Área de Endemismo para las Aves (EBA), por su alto grado de especies endémicas y que cuenta con las aves marinas pelágicas (Procelariformes), consideradas las más amenazadas a nivel global. La zona es también un importante corredor migratorio para aves marinas, acuáticas y terrestres que se desplazan desde Europa hacia África y albergan 29 especies diferentes de cetáceos como zifios, rorcuales, cachalotes, delfines, calderones y orcas, que convierten la zona en una de las más importantes del mundo.