resultado del 10-N
Reacciones al adiós de Rivera: del "lamento" de Casado al "víctima de su propio veneno" de Asens
El presidente de Ciudadanos deja la política tras la debacle electoral de la formación naranja
La marcha de Albert Rivera de la vida política tras el descalabro electoral de Ciudadanos es la primera consecuencia de los resultados de las elecciones generales del 28 de abril. La reacción más inmediata tras su dimisión como presidente del partido y la renuncia al acta de diputado es que el abogado del Estado Edmundo Bal, que había quedado fuera, va a ocupar su escaño en el Congreso. Otra de las consecuencias es que José Manuel Villegas, número dos de Rivera, asume las riendas del partido de manera provisional hasta que el Consejo General convoque una gestora, que tome el control hasta la celebración de esa asamblea extraordinaria que elegirá un nuevo líder naranja y decidirá la nueva estrategia.Uno de los primeros en reaccionar a la marcha del presidente de Cs ha sido el líder del PP, Pablo Casado, que ha lamentado "mucho" su dimisión. De Rivera ha destacado, en un mensaje en Twitter, que ha sido "un gran político y un patriota que ha defendido la libertad y la concordia donde más difícil era". "Siempre ha tenido toda mi consideración y afecto. Le deseo todo lo mejor en el futuro", ha expresado Casado en su tuit nada más saber la noticia.El secretario de Organización del PSOE, José Luis Ábalos, cree que Ciudadanos ha llegado a colocarse a punto de la disolución tras haber "unido su futuro a la derecha y la extrema derecha". En una rueda de prensa en el PSOE, que ha reunido a su Ejecutiva para analizar los resultados electorales, Ábalos se ha referido a la dimisión de Albert Rivera como "algo inédito" en democracia, la "renuncia de la política de quien no hace nada se veía presidente". Y ha subrayado que el proyecto de Ciudadanos era hace tan solo un año y pico "de éxito, llamado incluso por algunos a gobernar España", pero ahora asistimos "prácticamente a su disolución". "No estaría mal aprender la lección", ha dicho el dirigente socialista, quien ha lamentado que Rivera decidiese en su momento hacer un discurso "absolutamente beligerante de veto a la socialdemocracia" y "unir su futuro a la derecha y a la extrema derecha". Y eso ha provocado, ha señalado, que Ciudadanos haya acabado "nutriendo a la extrema derecha".También el exprimer ministro francés y concejal en Barcelona, Manuel Valls, se ha pronunciado sobre el adiós de Rivera, apuntando a la portavoz de Cs en el Congreso, Inés Arrimadas, como su reemplazo al frente del partido. "Estoy seguro de que tiene mucho recorrido político por delante y que puede representar muchas esperanzas", ha resaltado. Sin embargo, para Valls no se trata solo de un "problema de personas". "Es un problema de orientación y de cambios que Ciudadanos tendrá que hacer", ha manifestado sobre la formación 'naranja' haciendo alusión a que ahora deben de analizar "las consecuencias de los resultados de este domingo".Por su parte, ERC, por boca de su portavoz Marta Vilalta, ha defendido que el líder de Cs "no tenía ninguna otra alternativa" que dimitir tras los resultados de las elecciones. En rueda de prensa, ha enfatizado que los republicanos presentándose solo en Cataluña han logrado más diputados que Cs presentándose en todo el Estado, por lo que cree que las reivindicaciones de ERC "tienen mucho más apoyo" que las del partido naranja. Ha insistido en que las urnas "han castigado enormemente a aquellos que han apostado por la confrontación, la criminalización y la persecución de unas ideas totalmente legítimas", como las independentistas.En una línea parecida, la número uno de JxCat, Laura Borràs, ha considerado que Cs nació "con la única voluntad de destruir todo lo que tenga que ver con Cataluña o con sus instituciones" y ha acabado "destruido". "Lo han demostrado con esta defensa enconada y con el apoyo que dieron al 155, y finalmente un partido que nació con este afán de destruir, en estas elecciones se ha demostrado que ha acabado destruido", ha dicho Borràs en declaraciones a la prensa en la sede electoral de JxCat.También Jaume Asens, portavoz de los 'comuns', ha opinado que es una decisión que tiene que ver con la posición de la formación naranja: "Cs ha intentado mimetizarse con la extrema derecha, ha comprado su marco mental y finalmente ha sido víctima de su propio veneno". Asens ha considerado que es una "decisión consecuente con el mal resultado de su partido" en las elecciones generales del 10 de noviembre, que ha dicho que no la lamentan pero que honra a Rivera. "Cuando agitas la bandera de la confrontación y el odio te arriesgan a que pueda haber alguien que te supere en odio y crispación", ha dicho.Del mismo modo, el coordinador federal de Izquierda Unida (IU), Alberto Garzón, ha acusado al ya expresidente de Ciudadanos Albert Rivera de ser el responsable junto al PP del auge de la extrema derecha en España gracias "a sus discursos incendiarios, sus excesos verbales y su actitud soberbia", y considera que el batacazo electoral de los naranjas se debe a que no ha respondido al ejercicio de renovación que sus electores le pedían. "La responsabilidad del crecimiento de la extrema derecha es de PP y Ciudadanos. La estrategia de Albert Rivera se estudiará en las universidades como la peor estrategia política a la hora de tomar decisiones tácticas", ha apuntado Garzón en la rueda de prensa posterior a la reunión de la Comisión Colegiada de IU.