Drogas al volante
CON LA CERCANÍA de la Navidad y el que estemos inmersos en un largo, larguísimo, puente afloran noticias en las que el consumo de drogas gana protagonismo.Y de manera especial cuando los que la protagonizan son conductores, una tendencia que parece ir al alza. Hace unos días coincidieron el tiempo casos de conductores de transporte escolar que dieron positivo en cocaína en Castilla y León. Obviamente, las noticias generaron incertidumbre entre los padres, preocupados porque dejan a sus hijos en manos de personas que habían consumido esa droga recientemente.Es probable, por cómo son los test de detección de este tipo de drogas, que esos conductores la hubieran consumido el fin de semana y acudieran el lunes a su puesto de trabajo ‘limpios’, pero con restos de la droga aún presentes en su organismo. Pero no es lo mismo consumir cocaína en el tiempo libre y acudir, pongamos, a trabajar a una oficina, que ponerse al volante, con decenas de vidas en tus manos. Y no solo en aquellos conductores profesionales sino en todos los conductores. La DGT está constatando que cada vez son más crecientes los casos de conductores que dan positivo en droga en un control de carretera. Lo que sorprende es que esos positivos no se circunscriben a un conductor joven durante el fin de semana. Al contrario, según admiten desde la propia Dirección Provincial de Tráfico, el perfil es muy amplio, tanto en edades tempranas como en otras más maduras y en cualquier día de la semana. Quizá por esa presencia creciente de la droga en los controles de carretera, sería necesario avanzar en modelos de detección que se vayan acercando a la eficacia que muestra el test de alcoholemia, que no ofrece dudas y no es necesario, como en el caso de los estupefacientes, enviarlo a un laboratorio para que certifique el positivo. Porque si no se hacen más controles de drogas es porque son caros y porque lleva tiempo hacerlos.