Candidatura partida en dos
LA CANDIDATURA ciudadana Imagina, una iniciativa que irrumpió con enorme fuerza en las pasadas elecciones de 2015 con más de 18.000 votos y seis concejales, está partida por la mitad. Y parece que de forma irreversible. Podemos, que participa en Imagina con tres concejales, RaúlSalinero, Blanca Guinea yMarco Antonio Manjón, ha decidido que sus ediles trabajen ahora «de forma autónoma» por la «situación irreversible» que se vive en la candidatura. Así lo expresó PabloFernández, secretario general de Podemos enCastilla y León, en una rueda de prensa que ofreció el pasado martes en la sede de la formación morada en Burgos. Dijo que la causa de esta decisión está la llegada, hace casi un año, de Antea Izquierdo en lugar de Javier Gil. Una llegada que ha generado tensiones y diferencias de criterio que se han escenificado en el Pleno.Sin embargo, y eso no lo dijo PabloFernández en la rueda de prensa, está decisión también tiene un claro componente estratégico de cara a las próximas elecciones de 2019. Sobre todo, después de que el secretario general, PabloIglesias, señalara la intención de que Podemos concurra a los próximos comicios municipales con su propia marca, por lo que el trayecto con Imagina debía llegar a su fin. A partir de esa decisión, será ahora Imagina, a través de una asamblea que celebrará el lunes, la que decida qué futuro les depara a los tres ediles de Podemos en la candidatura ciudadana. Ninguna situación será buena. Si siguen como ediles de Imagina -pero siguiendo las directrices que marca Podemos, ahora más que nunca- qué pasará cuando haya que adoptar acuerdos. Cómo podrían seguir ejerciendo de portavoces en el Ayuntamiento y la Diputación Salinero yManjón cuando en la candidatura ciudadana ya han asegurado que han perdido la confianza en ellos. Y si se van, pero pasan a ser concejales no adscritos, el efecto en Imagina será devastador porque pasará a ver reducida su influencia a la mitad. Habría una tercera posibilidad, que entreguen el acta, como esperan en Imagina.Pero escuchando el otro día a Pablo Fernández, no parece una opción.