Por qué será
DE AQUÍ a final de año estaremos atrapados por el mundial de fútbol y los flecos de la política nacional de altos vuelos. Dos circos romanos de pan para pobres que somos todos los que nos dejamos empujar a estos callejones sin salida. No interesa darnos tiempo para pensar en la realidad, congelada entre noticias diseñadas para distraer nuestra curiosidad y pantallas que atrapan nuestra vaga atención. Un paseo por cualquiera de las cadenas informativas de TV o Radio es cada vez más parcial cuando cuentan las medias verdades a medida de la tendencia del espectador. Se puede decir que, cada vez más el criterio que ha de salir de cada uno, está en manos de quien diseña las estrategias de pensamiento, análisis y decisión. Siempre ha habido púlpitos y altares desde los que se ha pregonado y hecho parroquia, esto es tan viejo como las piedras que hicieron templos y catedrales. Ahora se adoctrina desde las redes sociales y la fibra óptica donde se mide al milímetro la audiencia. La ingenuidad nos ha llevado en ocasiones a pensar que ande yo caliente, ríase la gente, por aquello de que si en lo cercano las cosas van bien, no importa lo que pase en lo lejano. Nada más apartado de lo que es porque todo está más que nunca, interconectado. Desde las provincias, deberíamos entender el mundo que nos rodea, como la consecuencia de influencias mayores que pueden afectar a las menores. Lo del pez grande que se come al chico, aunque no tenga que ser siempre así. Burgos necesita un equipo de gobierno municipal sólido de aquí a pocos meses que usemos las urnas como excusa, bajo la ley del péndulo que dará a los populares el mandato condicionado al apoyo de Vox. Exactamente en medio año, el 28 de mayo se quebrarán muchas vanidades y bravuconadas que los ciudadanos no perdonaremos. El día a día nos curte en base a las decepciones que vivimos en el foro municipal que ha conseguido mantenerse en pie, eso sí, sin ruidos con mandato socialista y apoyo incondicional descafeinado de Ciudadanos, que en breve desaparecerá como luz de gas. A estas horas, PP guarda en secreto el nombre del candidato, qué raro, por qué será.